Suunto ha logrado capear el impacto del coronavirus. La compañía de origen finlandés registró resultados positivos durante el 2020 y el 2021 y espera superarlos en el ejercicio de 2022, ahora ya bajo el paraguas de Lieshenbg. El fabricante de relojes deportivos se pone como reto recuperar su negocio y seguir creciendo en Asia, donde las restricciones ante la Covid-19 fueron mayores, lo que afectó más directamente a su negocio, tal y como afirma Ángel Vicente, director de operaciones del sur de Europa de Suunto en una entrevista a 2Playbook.
Por volumen de negocio, Europa representa el principal mercado para Suunto, con una actividad predominante en países como España, Alemania, Francia, y los Países Nórdicos, de donde la compañía es originaria. Desde que comenzara la crisis sanitaria a nivel mundial, Suunto ha registrado un aumento de la actividad de sus clientes de un 28%, impulsado por la popularidad de los deportes outdoor. Disciplinas que ya eran muy populares, como es el caso de ciclismo, el running o el senderismo, han incrementado notablemente sus registros.
“La parte de la electrónica deportiva ha sido una de las, no sé si beneficiadas, pero desde luego no perjudicadas por la pandemia. El mercado está bastante sano y el deporte en general ha sido uno de los grandes beneficiados. Los deportes al aire libre han sido la vía de escape, la gente necesitaba salir a hacer ejercicio. Justo después del confinamiento hubo un gran boom de deporte outdoor que, además se ha mantenido”, explica el director de operaciones del sur de Europa.
Suunto trabaja en Europa con Tech Data como distribuidora, incluida en España. La compañía realizó un importante cambio de estrategia en 2020 pasando de un modelo de distribución directo a tener un socio que se encarga de este proceso. A pesar de que el ecommerce sigue ganando peso, especialmente tras la crisis sanitaria, el fabricante de smartwatches no tiene previsto prescindir de la venta en puntos físicos. “Tenemos una máxima: tener nuestros productos donde el consumidor quiera encontrarlos”, señala Vicente.
En cuanto a las sinergias que la compañía puede obtener con su adhesión a la cartera de Lieshenbg, Vicente ha destacado la posibilidad de estar más conectado con la última tecnología y la innovación. El grupo chino cuenta con la certificación de empresa nacional de alta tecnología en China, lo que podría ser un importante impulso para el fabricante de relojes de alta gama. “La operación acaba de tener lugar, por lo que en el corto plazo no esperamos que haya cambios. Pero seguro que a medio-largo plazo nos permite ampliar nuestro horizonte y seguir desarrollando nuestro trabajo y creciendo”, ha añadido el portavoz de la empresa.
Crisis logística y de componentes
Una de las principales amenazas para Suunto, del mismo modo que para el resto del mercado, es la crisis logística de componentes a nivel mundial. Esta ya golpeó a la empresa finesa en 2021 y prevé que siga causando problemas durante el 2022. “El cuello de botella que vemos actualmente en el sector logístico nos está afectando. Al final, nuestra empresa trabaja con tecnología, que ha sido uno de los sectores más golpeados por esta crisis, por lo que hemos sufrido retrasos en la entrega e incluso hemos tenido que retrasar el lanzamiento de algunos de nuestros productos”, explica el director de operaciones del Sur de Europa.
“Hoy en día lanzar un dispositivo es mucho más complicado porque tienes una gran incertidumbre; proveerte de componentes ahora mismo es mucho más difícil de lo que lo era hace tres años. No creo que haya ni una sola empresa tecnológica que no esté sufriendo esta situación”, destaca Vicente. ¿Y la recuperación? “Contamos con que este 2022 todavía esté marcado por esta crisis, pero es cierto que da la impresión es que ese cuello de botella si que se está liberando un poco”, admite.
En un momento en que los grandes players tecnológicos y del mundo del retail están tomando posiciones en el mundo del metaverso y las NFTs, el directivo de Suunto ha descartado que esté entre sus planes a corto-medio plazo. “Estamos muy pendientes de todo lo que avanza el mercado, porque al final Suunto es una empresa digital y hay que ser conscientes de los cambios que hay en el sector. Pero no es lo que nos pide actualmente nuestro target” concluye.