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Lenovo Tenerife reactiva la ampliación del Santiago Martín tras cerrar 2021-2022 en equilibrio

El club canario tendrá un presupuesto de 8,2 millones en 2022-2023. El Cabildo aún está estudiando la reforma del pabellón para aumentar entre 800 y 1.000 localidades y construir una cancha anexa, un proyecto que quedó paralizado por la pandemia.

Lenovo Tenerife 2022 2023 pretemporada

Lenovo Tenerife se ha instalado en la élite del baloncesto español. El club canario volverá a presentar uno de los presupuestos más elevados de la ACB en 2022-2023 fuera de los equipos Euroliga. Lo más destacado, no obstante, es que el año pasado logró recuperar la senda de la rentabilidad pese a la pandemia y proyecta seguir en beneficios este año. Además, con los últimos éxitos y la campaña de abonados, el Cabildo ha vuelto a reactivar el plan para ampliar su pabellón, el Santiago Martín.

“El Cabildo está trabajando de nuevo para hacer una reforma que permita aumentar las localidades y mejorar las instalaciones”, explica a 2Playbook Félix Hernández, presidente del club canario. El proyecto se planteó en 2019, antes de la pandemia, pero el cierre de aforos y la necesidad de atender otras prioridades sociales y económicas obligaron a echar el freno.

De momento no ha salido a fase de licitación, y el Ejecutivo regional debe estudiar y actualizar los proyectos planteados entonces. Se desconoce a cuánto podrían ascender las obras, pues dependerá del proyecto elegido. Lo que se plantea inicialmente es aumentar el aforo entre 800 y 1.000 nuevas localidades, además de construir una o dos canchas anexas para los entrenamientos y que den servicio a la ciudadanía en lugar de ocupar la pista central.

Lenovo Tenerife ya ha logrado pasar de 3.000 abonados para 2022-2023, para un recinto con capacidad para 5.200 personas. El equipo ACB logró una asistencia media de 4.873 espectadores en 2019-2020, y el año pasado cayó a 3.428 personas por las limitaciones de aforo. Eso sí, desde la reapertura de los pabellones logró casi 4.200 asistentes, con tres partidos por encima del 90% de ocupación. “Este año aspiramos a mantener esa cifra durante todo el curso, con más de un 90% de afluencia media”, indica Hernández.

 

 

El recinto acumuló 169.000 espectadores en 2019, último año antes de la pandemia, en más de 54 eventos. Lo logró gracias al CB Canarias y el CDB Clarinos, equipo de Liga Femenina Endesa, principales usuarios de la instalación, pero, sobre todo, con la Final Four de la BCL y los encuentros de las selecciones absolutas de baloncesto. Por sus puertas pasó también el Mundial femenino de 2018 y las Supercopas ACB de 2020 y 2021, entre otros eventos.

Ampliar el pabellón también sería clave para el negocio del club, puesto que el ticketing aporta un 24% de sus ingresos. Para esta campaña, la dirección confía en que la cifra de negocio vuelva a estar por encima de los 8,2 millones presupuestados. “Tener un pabellón más grande no quiere decir que puedas llenarlo, pero sí que es una de las vías que nos permiten ampliar los ingresos propios, porque el resto dependen del reparto de la ACB y otras competiciones y los patrocinios”, afirma.

El presidente considera que “reformar y ampliar el pabellón es la mejor solución a corto plazo, y más con la situación socioeconómica en la isla; no podemos ni queremos que el Cabildo realice una inversión mayor en este contexto”. Aun así, reconoce que “a medio plazo será una necesidad, porque esta es la instalación más grande de la isla y si queremos captar un público más joven y grandes eventos, sea de baloncesto u otros sectores, necesitaremos un nuevo pabellón. Además, tenemos una limitación presupuestaria superior al estar en las islas, y parte de ese sobrecoste por competir recae en el aficionado, que lo entiende y costea el espectáculo, pero si queremos ser ambiciosos tenemos que sumar más abonados”.

De ahí que el presupuesto apenas aumente respeto al año pasado. El incremento se debe a que los ingresos serán superiores a los de 2021-2022, con dos nuevos patrocinadores que el club espera cerrar en las próximas semanas. La filosofía en torno al patrocinio no ha cambiado: matrimonios a medio y largo plazo para no poner en jaque la estabilidad del proyecto. Así se demuestra con las renovaciones de Lenovo y Austral, entre otras.

Por último, el club pudo cerrar en beneficios la última campaña gracias al millón de euros por ganar la BCL. Eso sí, no es un millón neto, ya que hay que descontar el coste de participar en la competición y las primas a los jugadores, como ya le sucedió al Burgos el año anterior. Hernández, aun así, reconoce que “ha sido suficiente para cuadrar el desfase presupuestario respecto a lo que habría generado la taquilla en un año normal”.

Por último, el club ha dispuesto de tres créditos avalados por el ICO que se devolverán en los próximos cuatro años. Para ello, cada temporada se destinará aproximadamente un 2,5% de las ganancias a saldar dicha deuda, de forma que su devolución salga de la actividad orgánica de la propia entidad.  

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