El Ayuntamiento de Sevilla vuelve a sacar a concurso la gestión del Maratón. El consistorio publicó ayer los pliegos de contratación pública para adjudicar la gestión de la prueba en plena batalla judicial defectos de forma en la anterior licitación. Se prevé que vuelvan a presentarse RPM-Mktg, que resultó ganadora la vez anterior, y Motorpress Ibérica, que ha organizado la carrera durante los últimos ocho años.
Al margen de la nueva licitación de este contrato, RPM-Mktg y Motorpress siguen adelante con los recursos presentados contra el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales del Ayuntamiento de Sevilla (Tarcas). El organismo resolvió que los pliegos estaban mal redactados, por lo que anuló la licitación del contrato, adjudicado en verano, como adelantó 2Playbook. Desde Motorpress Ibérica argumentan que no hubo defecto de forma, sino que el Tarcas estimó en parte las alegaciones que presentaron.
Si bien el concurso lo ganó RPM, gestora del Maratón y Medio Maratón de Barcelona, el anterior organizador recurrió en dos ocasiones. El Tribunal desestimó la primera, que era en contra de la mesa de contratación, que no fue admitido porque el organismo lo consideró acto de trámite y en ese momento aún no se podía admitir. El segundo fue el que permitiró la resolución del Tarcas contra la adjudicación, lo que ha provocado que Sevilla vuelva a sacar a concurso el contrato. A raiz de ahí, Motorpress Ibérica presentó otro recurso ante el Instituto Municipal de deportes, del que no ha habido respuesta, según informa la compañía.
RPM-Mktg se adjudicó el concurso, que tendrá que volver a repetirse por defectos de forma
En concreto, Tribunal admitió las alegaciones de Motorpress Iberica, que denunciaba que en el proyecto técnico, correspondiente al sobre número 2, RPM-Mktg había incluido información que debía aparecer en el sobre 3, referente al proyecto económico, y viceversa. Es un error que es motivo de exclusión, pero RPM-Mktg alegó que había presentado su propuesta de esta manera porque así lo requería el pliego. De ahí que esta gestora apunte a que hubo un defecto de forma.
Los nuevos pliegos vuelven a incluir tres sobres, pero sí detallan qué tipo de documentación debe incluirse en cada uno de ellos. RPM-Mktg, sin embargo, seguirá adelante con su recurso contencioso-administrativo contra la resolución del Tarcas, al considerar “injusto” que deba “volver a organizarse el concurso tras revisar los expedientes y las propuestas”.
Por otro lado, Motorpress Ibérica considera que el error lo ha cometido el Instituto Municipal de Deportes (IMD), empresa pública titular de los derechos de la carrera de running y encargada de notificar a las empresas licitadoras que deben corregir algún error en las propuestas. Por ahora se desconoce si otras empresas participantes, como AS Sport y Ebone.
Motorpress considera que el IMD no cumplió su función al no notificar el error
Los requisitos económicos
El Maratón de Sevilla está considerada como la mejor en España por la federación internacional de atletismo, World Athletics. El plan de negocio establecido en los nuevos pliegos es similar al del anterior concurso, y proyecta que la empresa encargada de la organización debe lograr unos ingresos de 1,6 millones de euros por edición, para un total de 4,6 millones de euros en ese ciclo. De cumplirlo, el contrato podría prolongarse dos años más, hasta 2026.
En los nuevos documentos no sólo se mantiene el compromiso del IMD de subvencionar la cita en 2021, sino que incrementará ligeramente su aportación, desde el máximo de 372.000 euros previstos en los anteriores pliegos, a los 378.000 euros en el nuevo concurso. Esta aportación supone el 23,9% de la previsión de ingresos, e irá disminuyendo progresivamente hasta que en 2024 apenas suponga el 14,57% del total.
En total, el IMD aportará un máximo de 1,24 millones de euros hasta 2024, equivalente al 19,22% de la previsión total de ingresos. Esta cuantía también está supeditada a una serie de variables, como lo que cobrará el Instituto por cada dorsal una vez se supere el mínimo de 11.326 corredores inscritos.
El consistorio vuelve a proponer que los residentes en la ciudad y el resto de la provincia no pagaran más de entre 27,7 euros y 80,82 euros por su dorsal, dependiendo de la fecha en la que se inscribieran. Para los no residentes no se establecían distintos baremos según el calendario, pero sí un precio máximo de 93,07 euros.
El IMD ha incrementado ligeramente su aportación máxima para cada edición en los próximos seis años
La previsión es que esta partida asegure una aportación de 450.441 euros en 2021, casi 150.000 euros menos que en la edición anterior. De hecho, el Ayuntamiento estima que los ingresos por la venta de dorsales no recuperarán los niveles de 2020 hasta, como mínimo, 2026, el último año de prórroga del nuevo contrato.
Lo mismo sucede con los ingresos de patrocinio, que el plan de negocio adjunto a la licitación contempla que se hundan un 25%, pasando de 781.000 euros a 588.093 euros. Al igual que con las inscripciones, la inversión en patrocinio tampoco remontará hasta 2026, aunque los primeros brotes verdes podrían empezar a llegar en 2024, cuando se estima que los acuerdos con espónsors vuelvan a aportar cerca de 700.000 euros.
Otro de los objetivos de Sevilla con este nuevo tender era conseguir dar un impulso a la cita deportiva, de modo que impulse su proyección nacional e internacional, como ya han logrado hacer otras ciudades españolas como Valencia. Sin ir más lejos, los pliegos exigen al adjudicatario que consiga que el Maratón de Sevilla obtenga como mínimo la categoría IAAF Silver Label, pues actualmente tiene una superior, la Gold. La máxima distinción es la Platinum, una condición que en España sólo tiene el Maratón Valencia Trinidad Alfonso EDP.
La categoría Silver, que sería la tercera por importancia, es la que actualmente tienen el Movistar Medio Maratón de Madrid, la 15K Nocturna Valencia Banco Mediolanum y la Zurich Marató Barcelona, gestionada por RPM-Mktg y que precisamente busca dar el salto a la siguiente categoría. De hecho, para lograrlo ha propuesto destinar 505.000 euros para la contratación de deportistas de élite que eleven el atractivo de la cita, un importe que está muy por encima de los 365.000 euros que proponía Ironman.
La cita de este año ha sido aplazada hasta el 14 de noviembre, cuando tradicionalmente suele celebrarse en febrero. La pandemia ha obligado a retrasar su celebración tras salvarse de la quema el año pasado. Ese será el plazo que tenga el Ayuntamiento para cerrar el nuevo concurso, mientras espera la resolución judicial de los diferentes recursos.