La industria del bienestar se consolida como una fuerza económica a nivel global. En 2024 alcanzó una facturación de 6,76 billones de dólares (5,8 billones de euros), superando un año más otros motores económicos como las tecnologías de la información, la economía verde, el turismo o las farmacéuticas. Si ya en 2023 dejó atrás la pandemia, el año pasado aceleró un crecimiento que se ve impulsado por una mayor concienciación global por el bienestar de las personas. Y esta es la oportunidad para las compañías de wellness, que se prevé que facturen más de 7,3 billones de dólares (6,3 billones de euros) en 2025 y doblen el tamaño del mercado respecto a hace diez años. A futuro, se espera que crezca un 44,2% hasta 2029, a un ritmo del 7,6% interanual, hasta 9,75 billones de dólares (8,37 billones de euros, según Global Wellness Economy Monitor 2025.
El informe del Global Wellness Institute (GWI), que mide la industria del bienestar global con datos de más de 218 países, augura un gran potencial de desarrollo a mercados como el de la actividad física, que en 2024 facturó 1,14 billones de dólares (1 billón de euros) en todo el mundo y representa un 16,9% del total de esta industria. Es decir, que prácticamente dos de cada diez euros invertidos en bienestar se destinan a productos, servicios, soluciones o equipamientos vinculados al deporte. Y se prevé que el sector acelere su marcha en los próximos años. Tras crecer a un promedio anual del 4,6% entre 2019 y 2024, se estima que lo haga a un ritmo del 5,1% hasta 2029, cuando podría llegar a facturar 1,46 billones de dólares (1,25 billones de euros). Sólo en Europa, se calcula que ingresó 289.900 millones de dólares (248.871 millones de euros) el año pasado. En España, los sectores vinculados a la práctica deportiva superaron los 20.000 millones de dólares en ingresos.
Los negocios vinculados al bienestar, sin embargo, van mucho más allá. De hecho, la proyección de crecimiento de la industria de la actividad física obtiene el cuarto porcentaje más bajo de entre las once categorías analizadas por GWI. Son ámbitos que se retroalimentan y complementan: desde la comida saludable al turismo de wellness, pasando por los servicios de bienestar mental, los spas o los productos de cuidado personal. Un conglomerado de segmentos que representan el 6,1% del PIB mundial y que ambiciona elevar su peso hasta el 7,08% en 2029.
El once de gala de la industria del bienestar lo encabezan, un año más, los productos y servicios para el cuidado de la apariencia personal y la belleza, que abarcan el cuidado de todo el cuerpo. Sólo en 2024, se estima que este segmento facturó 1,3 billones de dólares (1,15 billones de euros) en todo el mundo, lo que representa un 19,9% del gasto total. Pese al freno que experimentó en 2020, se recuperó los años posteriores, registrando un alza interanual del 5,4% en 2024. Se prevé que crezca a un 4,8% cada año hasta 2029, la tercera previsión de crecimiento más comedida de los once sectores.
El segundo mayor mercado es el de la alimentación saludable, nutrición y pérdida de peso, categorías que sólo incluyen aquellos productos, sean alimentos, vitaminas o suplementos dietéticos, con una certificación específica como agentes mejoradores de la salud y del control del peso. A diferencia de la anterior categoría, este grupo no sufrió un freno durante la pandemia. La crisis sanitaria elevó la conciencia global acerca de una mejor alimentación, lo que favoreció que creciese incluso en 2020. Mueve más de 1,1 billones de dólares (985.520 millones de euros), el equivalente al 16,9% del total, y se prevé que crezca un 7,1% en los próximos cinco años.
Tras la actividad física, el bloque que mueve un mayor negocio es el turismo de bienestar, que genera unos 893.900 millones de dólares (677.967 millones de euros). Fue el sector más afectado por la pandemia debido a las restricciones de movilidad, pero ya en 2023 marcó su máximo histórico y en 2024 volvió a batir su récord, creciendo un 13,8% interanual. Ahora apunta a crecer un 9,1% cada año hasta 2029.
Los viajes asociados a mejorar el bienestar personal son la principal motivación a la hora de hacer turismo, por delante de los laborales. Asia-Pacífico, que en 2023 desplazó a Europa como la región que más viajes generó el año pasado, consolidó su liderazgo en 2024, tras registrar 562,7 millones de desplazamientos, casi el triple que los registrados en 2022. Ese año aún se mantenían fuertes restricciones contra la covid en algunos de sus territorios. En el Viejo Continente crecieron a un ritmo menor, con un alza interanual del 6,5%, hasta 348,4 millones de desplazamientos. Eso sí, quedó relegado al cuarto escalón en lo que a gasto medio por trayecto se refiere: 741 dólares (636 euros) por persona, un 15% menos interanual, frente a los 1.449 dólares (1.243 euros) de Estados Unidos, a los 1.257 dólares (1.079 euros) de Oriente Medio y el Norte de África y los 908 dólares (779 euros) del África Subsahariana, regiones que han ganado peso.
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En quinta y sexta posición aparecen el gasto en servicios médicos y de salud pública que se centran en prevenir enfermedades o detectar factores de riesgo y los sistemas, servicios, prácticas y productos de medicina tradicional complementaria, que facturaron 675.900 millones de dólares (576.683 millones de euros) y 605.600 millones de dólares (516.703 millones de euros), respectivamente. Son dos ámbitos cuyas perspectivas de crecimiento han registrado tendencias al alza: la primera ha pasado del 1,6% para el ciclo 2022-2027 al 4,7% para el lustro 2024-2029, mientras que la segunda crece del 8,2% al 10,8%.
Un año más, el sector al que GWI atribuye un mayor potencial de crecimiento es a las propiedades inmobiliarias residenciales, comerciales e institucionales que incorporan elementos de bienestar en su diseño. Es uno de los dos segmentos que se prevé que más que doble su negocio, pasando de 548.400 millones a más de 1,1 billones de dólares (de 465.340 millones a 950.474 millones de euros) entre 2024 y 2029. Ya era uno de los sectores que mayor volumen estaba adquiriendo antes de la pandemia y no ha dejado de crecer en los últimos años. Sus perspectivas de futuro son las más optimistas dentro del conjunto de sectores, ya que se estima que incremente su negocio un 15,2% anual en el próximo lustro.
La otra categoría a la que se le intuye un mayor potencial es a los productos y servicios enfocados a cuidar el bienestar mental, para los que se augura un alza interanual del 10,1%. El estrés provocado por la pandemia aceleró la compra de productos, servicios y soluciones de este bloque, que en 2024 generó 268.3000 millones de dólares (228.916 millones de euros). Una cifra que prevé prácticamente duplicar, hasta 434.600 millones de dólares (370.804 millones de euros) en los próximos cinco años.
De los tres segmentos con un menor volumen de negocio, todos ellos superaron el año pasado la totalidad de los ingresos previos a la pandemia. En el caso de los spas, es una opción por la que apuestan cada vez más hoteles y también centros deportivos premium. Este segmento apunta a una recuperación del 7,7% interanual hasta 2029. En el caso del wellness corporativo, es decir, los espacios y servicios destinados al bienestar dentro de las empresas, apunta a un crecimiento menor, del 2,2%, tras situarse el año pasado un 3,4% por encima de 2019. En el caso de los manantiales o resorts de agua mineral y termal, que el año pasado se situó un 8,9% por encima de los ingresos previos a la pandemia, las perspectivas son mayores, pues prevé crecer a un ritmo interanual del 10% y prácticamente doblar, en 2029, el negocio de 2019.
España, una de las principales potencias mundiales de la economía del bienestar
Pero, ¿y qué papel juega España dentro de la industria del bienestar? El país se ha posicionado en los últimos años como uno de los principales mercados globales de varias de estas categorías. El año pasado se situó como uno de los quince principales mercados en hasta cinco categorías que facturaron 46.230 millones de dólares (39.443 millones de euros) en 2024, un 9,6% más interanual. GWI aún no ha detallado qué negocio total movió la industria del bienestar en España el año pasado, aunque sí aporta cifras de las categorías mencionadas.
El mercado de la actividad física -aquí se incluyen desde la participación en actividades de fitness, deportivas y de mindfulness, hasta ropa y calzado deportivo, tecnología vinculada al fitness y equipamiento deportivo- batió su récord en 2024 con 20.400 millones de dólares (17.405 millones de euros), un 6,3% más interanual. España fue el undécimo mercado mundial en esta categoría, manteniendo la misma posición que ocupó en 2023.
Un año más, el país no aparece en el Top-20 de los que más facturan por real estate wellness en la actualidad, pero sí se está posicionando en este ámbito, ya que fue el quinto que registró más proyectos certificados por Well y Fitwell (117), los dos principales sistemas de valoración de sistemas de edificios de bienestar a nivel global, el año pasado. Sí ocupa una posición destacada, en cambio, en lo que respecta al workplace wellness, los gastos de las empresas para mejorar la salud y bienestar de sus empleados. España ocupa la séptima posición, con una inversión de 1.510 millones de dólares (1.288 millones de euros), un 1,3% más que en 2023.
En el caso del turismo de bienestar se mantiene decimotercero, pese a crecer un 14,3% interanual, hasta 16.700 millones de dólares (14.248 millones de euros). Se estima que el país acogió 20,8 millones de viajes por este concepto, un 1,6% del total a nivel mundial y un 3,4% más que en 2023.
España también aparece bien posicionada, en la novena posición, en el sector de los spa. En este segmento cayó dos escalones. Éstos generaron un volumen de facturación de 3.780 millones de dólares (3.225 millones de euros), un 12,5% más que en 2023. Finalmente, es decimotercero en bienestar mental, con 3.840 millones de dólares (3.276 millones de euros), un 12,9% más que en 2023. Por lo que respecta a resorts y manantiales de agua termal y natural, es decimoquinta, con 760 millones de dólares (648 millones de euros), un 3,9% menos interanual. Según GWI, esta caída se explica por el impacto de la Guerra de Ucrania, que frenó el turismo ruso y provocó dificultades a muchas empresas europeas de aguas termales debido a los altos precios de la energía. España es, junto a Francia, uno de los países donde aún no se ha recuperado el negocio previo a la pandemia. Ambos países, sin embargo, se encuentran entre los que prevén abrir más establecimientos de este tipo a partir de 2025.
Sobre Intelligence 2P
Intelligence 2P es la unidad de estrategia e inteligencia de mercado de 2Playbook, cuya plataforma de datos monitoriza en tiempo real el negocio de medio centenar de cadenas de gimnasios, para analizar y comparar el rendimiento anual de las compañías en sus distintas líneas de actividad.
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