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Salarios, competencias y formación: ¿qué factores provocan la rotación laboral en el fitness?

La búsqueda y retención de talento en las plantillas lastra el crecimiento de las cadenas de gimnasios, que exigen una serie de conocimientos que no siempre encuentran en el mercado. Fidelizar a los empleados, el primer paso para mantener a los clientes.

Mesa redonda Adecaff mercado laboral

El mercado laboral es un rompecabezas sin resolver para el sector del fitness. Mientras los gimnasios siguen diseñando estrategias para dejar atrás la pandemia o el impacto de los costes energéticos, la captación y retención de talento en las plantillas sigue siendo un problema crónico para una industria en permanente evolución. 

Sobre los problemas que presenta el mercado laboral en el sector del fitness han debatido algunos expertos en una mesa redonda organizada por Adecaff, la patronal catalana del fitness, en la que también han acudido jóvenes alumnos del grado de Ciencias de la Actividad Física y el Deporte (Cafe) de la Universitat Ramon Llull - Blanquerna y también de distintos ciclos profesionales vinculados al deporte. Distintos agentes del sector han coincidido en la necesidad de que tanto empresas como los futuros empleados acerquen posturas para que sus respectivas demandas y expectativas coincidan y puedan, así, establecerse relaciones más estables a largo plazo. El reto, poner fin a la precariedad laboral y a la volatilidad del empleo deportivo. 

Uno de los puntos que más distancia en la actualidad a las empresas y a los empleados es la diferencia entre las habilidades que solicitan las primeras y las competencias y conocimientos que los segundos adquieren en los centros formativos. “Los perfiles que llegan hoy en día al mercado laboral no están suficientemente formados”, ha arrancado Sílvia Pont, responsable de formación de Duet Sports. 

El sector de los gimnasios afirma que uno de los retos laborales es poner fin a la precariedad

Uno de los problemas que ha detectado esta cadena de gimnasios es la dificultad a la hora de encontrar “personas con todas las competencias, tanto a nivel técnico como de servicio, adecuadas a los empleos que ofrecemos en nuestros centros”. Según Pont, son tan importantes las competencias técnicas como las de servicio. Un trato amable con el cliente es tan necesario como saber tratar sus necesidades físicas. “Trabajamos en salud, pero estamos al servicio del cliente: tenemos que saber, pero también saber hacer, ya que somos una guía para las personas y esto es algo que no se enseña en las universidades”. 

El amplio abanico de opciones formativas que tienen a su alcance los jóvenes que quieren acceder al mercado laboral deportivo les obliga a decidir entre estudios genéricos y otros específicos. Pere Sorolla, entrenador personal y formador de técnicos fitness miembro del colegio de profesionales Colef, ha defendido la necesidad de combinar ambas formaciones para que los profesionales del mañana tengan las habilidades necesarias para adaptarse a las nuevas tendencias del sector.

“La formación específica fue una herramienta rápida y efectiva para poder realizar un trabajo concreto, el técnico de fitness y entrenador personal, pero no me imaginaba siendo técnico de cycling con 60 años. Opté por acceder al grado de Inef para poder especializarme luego en gestión, entrenamiento o salud. Mi desencanto llegó al ver que, en el trabajo que tenía por las tardes, apenas aplicaba los conocimientos que iba adquiriendo a lo largo de los cuatro años de carrera”. Con el título universitario adquirió una visión global que le permitió desarrollarse “de una forma más holística”. Ese grado, ha aclarado, representa una base imprescindible a partir de la cual seguir escalando con formaciones más específicas “sin las cuales no se adquieren las competencias que piden en los centros de fitness”. 

Dar forma al entorno laboral es responsabilidad de los diferentes agentes del sector, según ha apuntado Gerard Monguió, jefe de formación y fundador de la Royal Escuela de Formación, centro de formación especializada en el sector deportivo, restauración, gestión e idiomas. “El mercado laboral que tenemos es responsabilidad de nuestros gestores: tenemos que ofrecerles trabajos de calidad adaptados a la formación que reciben los jóvenes”. 

El mercado y las tendencias exige que los profesionales deportivos dominen la tecnología para ofrecer un servicio más personalizado

Los centros formativos también juegan un papel clave en esta ecuación. “Si tenemos una alta rotación de personal es, seguramente, porque nos equivocamos en lo que pedimos a nuestros alumnos. Tenemos que asegurarnos, en las escuelas, de dar la formación adecuada para el empleo que buscan”, añade Monguió. Héctor Robledo, director corporativo de Anytime Fitness, corrobora que la permanente evolución de los requisitos del mercado laboral no es una tendencia exclusiva al mercado español, sino que también se replica en otros mercados de EEUU y Europa. “Nuestra franquicia ha pasado, a nivel global, del modelo de conveniencia a otro enfocado al coaching model, que implica estar más cerca del cliente, dedicarle mayor tiempo y personalización a través de la tecnología”. Este cambio estratégico supone buscar profesionales que dominen estos nuevos registros. 

La estabilidad laboral es otro factor a tener en cuenta. “Existe una correlación directa entre la alta rotación de socios y la de trabajadores. Lo que hacemos mal las empresas es que no estamos fidelizando el talento, y eso ocurre, en parte, porque los empleados no se alinean con los valores de la compañía. Si los trabajadores ven que su trabajo influye directamente en el crecimiento de la empresa será más fácil mantenerles”, ha comentado Robledo. 

Ahí entra en juego otro aspecto clave: los salarios. La precariedad laboral sigue muy presente en un sector, el deportivo, en el que el intrusismo sigue a la orden del día: “La ley de profesiones del deporte ha supuesto una mejora, ya que ha ayudado a regular y ordenar una parte del sector. Nos sorprendió que hubiera grandes diferencias entre voluntarios que apenas cobraban y profesionales que percibían grandes nóminas”, ha comentado Gemma Vilaró, directora de la Escola Catalana de l’Esport y una de las responsables del Registro Oficial de Profesionales del Deporte de Cataluña (Ropec), que cuenta con unas 13.000 personas registradas y por lo tanto vinculadas al sector del fitness y otras modalidades deportivas.  

“Ahora están de moda los instructores de yoga. Les ofrecen 25 euros por hora, pero el problema llegará cuando dentro de dos años deje de estar de moda. Eso ocurrió con el cycling: los gimnasios fichaban a los mejores monitores y ahora, con las salas de ciclo indoor vacías, muchos hacen de monitores de fitness por ocho euros la hora. No se trata ni de un extremo ni del otro, tenemos que ponernos todos de acuerdo, porque cuando el empleado sufre, deja el sector y las empresas se quedan sin personal”, ha reflexionado Monguió.

Especializarse en una única modalidad, por tanto, puede suponer una solución a corto plazo, pero a largo plazo resulta imprescindible adaptarse a las nuevas tendencias. “¿Pero cuánto tiempo te durará un trabajo de este tipo? Si buscas un paquete mínimo de horas que te dure varios años es importante que las empresas mantengan una estructura de valor añadido y que los empleados no sólo valoren el salario económico, sino también el emocional. Por eso, es clave que las empresas tengan una estructura de valor añadido y puedan ofrecer perspectivas de futuro, con diferentes roles, a sus trabajadores”, ha resuelto Pont. 

El sector deportivo, recreativo y de entretenimiento cerró el pasado mes de enero con una media de 241.353 inscritos a la Seguridad Social. Aunque representa el tercer mejor dato desde el estallido de la pandemia, se trata de una industria con un amplio margen de mejora, no tanto en la captación, sino en la retención.

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