Las estaciones de esquí dejan atrás el duro golpe que supuso la pandemia por la Covid-19. Las pistas españolas han logrado cerrar una temporada en la que se podrá volver a superar la cota de los 100 millones de euros de facturación, muy por encima de los 37,2 millones de euros que se ingresaron en la campaña anterior. Además, el número de visitantes también se ha recuperado y cerrará la 2021-2022 por encima de los cinco millones de visitantes, según explica a 2Playbook Jesús Ibáñez, presidente de la Asociación de Estaciones de Esquí y Montaña de España (Atudem).
“No podemos decir que la temporada ha estado al 100%, pero desde luego que sí al 90%. Se ha notado que el esquiador tenía muchas ganas de volver a las pistas y que las inversiones que han hecho las estaciones han permitido ofrecer al cliente un servicio de calidad”, destaca Ibáñez. Hay que recordar que, al igual que las ventas, el número de visitantes también registró mínimos en la campaña de 2020-2021, bajando hasta los 1,5 millones de forfaits. Esta cifra supuso una caída del 68,7% interanual.
En línea con el resto del sector turístico, desde Atudem explican que el viajero nacional ha sido el primero en recuperarse y las cifras de asistencia estarían en niveles previos a la crisis sanitaria. A pesar de ello, el visitante extranjero todavía se mantiene por debajo de los máximos registrados en años anteriores. “En algunas estaciones, como Baqueira Beret, el turista internacional representa hasta un 20% de la facturación total”, destaca el presidente de la patronal.
El visitante que más ha costado recuperar es el británico, ya que al comienzo de la temporada todavía contaban con restricciones en materia de movilidad. Desde Atudem atribuyen la falta de visitantes internacionales a un mayor turismo de proximidad, aunque están seguros de que “en las próximas campañas volveremos a recibir al viajero extranjero de alto poder adquisitivo que normalmente recibíamos”.
Esta situación ha afectado directamente a la estancia media registrada en la campaña por las estaciones de esquí. “Hay que tener en cuenta que la falta de turistas internacionales tiene un impacto directo en la estancia media, ya que son los que más pernoctaciones reservan cuando viajan. A pesar de que no se ha recuperado el nivel de otras campañas estamos muy contentos y las cifras son muy positivas”, incide el presidente de Atudem.
Por otro lado, el ingreso medio que el último invierno se situó en 24,5 euros por visitante también ha mostrado una evolución positiva. “Se nota que los clientes tienen ganas no sólo de esquiar y pasar un día en las pistas, sino también de disfrutar de todas las actividades que rodean a esta experiencia”, añade Ibáñez.
Otra de las cifras que registró una importante bajada en 2020-2021 como consecuencia de la pandemia fue el empleo, con una caída de en torno al 30%. El número de trabajadores en la 2021-2022 ha vuelto a superar la barrera de los 3.000 empleos directos, en línea con los datos que se venían registrando con anterioridad a la crisis sanitaria, cuando el dato fue de 3.020 puestos de trabajo. Hay que tener en cuenta que estas cifras no incluyen los numerosos puestos indirectos que genera cada año el sector en actividades como la hostelería, la restauración o el alquiler de material.
Subida de los precios
Uno de los factores que más ha afectado a las estaciones de esquí ha sido la subida del precio de la energía y de los suministros. Esta situación ha hecho que muchas instalaciones hayan optado por subir el precio de los forfaits. “Evidentemente ha habido que actualizar los precios, ya que uno de nuestros principales gastos es de la electricidad y este coste se ha multiplicado por tres. Además, venimos de años en los que lo hemos pasado mal y hemos tenido que luchar por sobrevivir”, destacan desde Atudem.
A pesar del golpe que supuso la Covid-19 para las dueñas de estas estaciones, el sector realizó un importante esfuerzo para preparar la temporada que ahora termina, con una inversión en conjunto de 38,2 millones de euros. Este dato ha estado por encima de los 36,2 millones de euros que de destinaron en la campaña anterior y la inversión ha estado principalmente centrada en la mejora de pistas, con una dotación de 14 millones de euros.
De este modo, las estaciones de esquí vuelven a respirar después de dos campañas marcadas por la incidencia de la pandemia. De acuerdo con la Federación Europea de Artículos Deportivos (Fesi) el sector del esquí europeo dejó de ingresar 3.000 millones de euros como consecuencia de los cierres y de las restricciones adoptadas por las autoridades. En el caso de la industria española se cifró el golpe de la crisis sanitaria en 80 millones de euros, registrando las peores cifras de la última década.
