Sierra Nevada ya trabaja con la mirada puesta en la campaña de 2022-2023. La estación granadina de esquí ha lanzado dos licitaciones con el objetivo de invertir en torno a 7,5 millones de euros en modernizar sus sistemas de producción de nieve, tanto a través de cañones como de herramientas de nieve asociada en pista. La contratación correrá a cargo de la propietaria de la instalación, Sierra Nevada Cetursa, y por el momento ambos procedimientos están abiertos.
El primero se trata de un contrato con un valor estimado de 4,5 millones de euros, y que estará cofinanciado por la Unión Europea, a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional, y que tiene como objetivo la ampliación de sistemas de producción de nieve, la sustitución de tuberías de agua, la instalación de un nuevo compresor y diversas modificaciones en la red de aire comprimido. La fecha límite para presentar ofertas a este concurso es el próximo 11 de julio.
La segunda licitación, que cuenta con una valoración estimada de 2,9 millones de euros, plantea diversas modificaciones en el suministro y montaje de dos telesquíes y su línea de nieve producida asociada en la estación. La licitación planteaba dos lotes para los interesados y esta misma semana el concurso se declaraba desierto al no haberse presentado ninguna oferta.
Hay que tener en cuenta que Sierra Nevada es una de las estaciones que más aficionados a los deportes de invierno recibe cada temporada y que en la última campaña tuvo a más de 72.500 usuarios bajando por sus pistas. Ya con el cierre de la temporada, Cetursa anunció que se invertirían 21 millones de euros – entre fondos propios y fondos procedentes de la Unión Europea (UE) – para sustituir los telesillas Emile Allais y Veleta II, que conllevarían la reordenación del área de iniciación de Borreguiles.
Además, a esta inversión se suma a la acometida ya en la anterior temporada – la de 2020-2021 – que supuso una inyección de seis millones de euros que estuvieron destinados a reforzar y aplicar algunas novedades en el área de nieve y en los servicios de atención al cliente. Así, se instalaron 77 nuevos cañones de nieve producida de última generación y máxima eficiencia energética, 4 máquinas híbridas pisapistas, que reducen el consumo y las emisiones de CO2 un 20%, y un nuevo centro de atención al usuario.
Por otro lado, hay que recordar que Cetursa está trabajando en un plan estratégico y en un plan de inversiones a medio y largo plazo, uno para el período 2020-2025 y otro para el 2026-2030, de acuerdo con las recomendaciones hechas por una auditoría encargada a Deloitte. Este plan contemplaría un importe total de 307 millones de euros destinados tanto a ampliar la superficie esquiable como al desarrollo hotelero de las inmediaciones de las pistas de esquí de la estación granadina.
De estos 307 millones se prevé que alrededor de un 81% estén destinados a la ampliación de la planta hotelera en la estación situada en la zona de los Peñones. Además, este importe también tendría como objetivo la construcción del primer funicular no aéreo de Andalucía, destinado a salvar grandes desniveles.
Para poder formalizar todas estas cuestiones Sierra Nevada formalizó hace tan sólo un mes una ampliación de capital de 6,9 millones de euros liderada por la Junta de Andalucía. Esta operación, que el Gobierno andaluz anunció el pasado noviembre, fue inscrita en el Registro Mercantil. Se trata de una ampliación ejecutada por la consejería de Hacienda para fortalecer a Cetursa Sierra Nevada tras el impacto de la pandemia en su actividad. En aquel momento el consejero de Hacienda y Financiación Europea, Juan Bravo, explicó en una presentación que buena parte de estos ingresos se reinvertirán en mejoras dentro de la estación.
Hay que tener en cuenta que la crisis sanitaria de la Covid-19 supuso un duro golpe para la industria de la nieve. En concreto, la facturación de las instalaciones andaluzas se desplomó en la campaña de 2020-2021, hasta los 16 millones de euros, y, además, la estación tuvo que presentar un Expediente de Regulación Temporal del Empleo (ERTE) que afectó al 82% de su plantilla. Durante esa temporada el confinamiento perimetral de Monachil (Granada), municipio al que pertenece Sierra Nevada, provocó que sólo pudieran acceder a las pistas los residentes de esa zona, los deportistas federados y los colectivos vinculados a las enseñanzas de los deportes de invierno con autorización especial.
Mejora los datos de 2019
La estación granadina afrontó la campaña de 2020-2021 con optimismo. A pesar de ello, lejos estaba la gestora de las instalaciones de pensar que la vuelta de los aficionados a la nieve le permitiría no sólo volver a registrar buenas cifras, sino superar los datos que se alcanzaron en 2019, año en el que la estación ya registró un récord de facturación, que en la última temporada ha logrado superar.
Así, Sierra Nevada cerró la temporada 2021-2022 con unos ingresos récord de 45 millones de euros, un 7,6% por encima del último ejercicio que se pudo desarrollar antes de que comenzara la crisis sanitaria, en la campaña 2018-2019, cuando la facturación fue de 41,8 millones de euros. Las pistas andaluzas recibieron en la última campaña a 72.500 usuarios, de los que 60.000 fueron esquiadores y los 12.500 restantes fueron visitantes, que disfrutaron de las actividades de nieve o que usaron los telecabinas para acceder al área de Borreguiles.
De cara a los meses de verano, la instalación busca alojar distintas competiciones con el objetivo de desestacionalizar la actividad de la estación. Así, el enclave granadino acogerá durante los próximos meses cinco pruebas deportivas de triatlón, atletismo y ciclismo en las que se espera que participen y asistan miles de personas. Entre ellas estarán el XI Kilómetro Vertical, la Sierra Nevada Límite y la Subida al Veleta, en la categoría de ciclismo, y el Triatlón Sierra Nevada.
