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Los dueños del club cotizado de esports FaZe Clan buscan un ‘exit’ tras hundir su valoración

El club de deportes electrónicos cotiza en la Bolsa de Nueva York desde julio de 2022, cuando arrancó con una valoración de 725 millones de dólares. Hoy una acción vale 50 centavos y su capitalización de mercado se ha hundido hasta 38,3 millones.

FaZe Clan 2023

Abandonar el barco antes del colapso. Los accionistas mayoritarios y fundadores de FaZe Clan han emitido un comunicado ante la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) en el que aseguran que han puesto a la venta su participación en el club de esports. Entre todos los firmantes suman el 62,54% de los títulos.

En el comunicado enviado a la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por su sigla en inglés) plantean diferentes alternativas. Por un lado, proponen la venta de sus acciones y una ampliación de capital a un precio de 11,50 dólares por acción, con una prima de emisión de 11 dólares. Las acciones de FaZe Clan cotizan actualmente a 0,52 dólares tras el último cierre de mercado.

Entre los vendedores está B. Riley Principal Merger Corp, con la que se había fusionado para salir a Bolsa a través de una Spac. Las Spac se popularizaron en la etapa post-confinamiento. Se las denomina empresas de cheque en blanco, ya que consistía en captar capital para empezar a cotizar rápidamente. También venderán los fundadores Yousef FaZe, Apex Abdelfattah, Richard Banks, Bengston II, Thomas Temper, Alves de Oliveira y Nordan Shat.

FaZe Clan se subió entonces a la ola de clubes de esports que cotizaron el Bolsa, como Enthusiast Gaming, OverActive Media, Guild o Astralis, entre otros. La compañía se valoró entonces en 725 millones de dólares (660,7 millones de euros), por debajo de la valoración de casi 1.000 millones con la que habían anunciado que arrancarían como empresa pública.

FaZe Clan cerró el ejercicio de 2022 con una facturación de 70 millones de dólares (63,8 millones de euros), un 32% más que el año anterior. Sus pérdidas casi se quintuplicaron, hasta 168,5 millones de dólares (156,2 millones de euros). Las pérdidas se engordaron debido a una importante deuda que arrastra, además de incrementar un 60% su gasto en marketing y administración.  

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