Nacido en pleno confinamiento, Falcons mira a los eventos físicos como principal palanca de crecimiento en 2022. El club de eSports fundado por César Azpilicueta dio un paso más con su entrada en LoL y de cara a este año espera contar con su propio espacio físico en Madrid. El proyecto no se realizará hasta pasado el verano, y Javier Villoria, su director general, explica a 2Playbook que “esperamos que sea un espacio para trabajar con marcas y la comunidad”.
Por ahora el proyecto no tiene ubicación y se desconoce la inversión que puede requerir. Por ahora se contemplan diferentes opciones, desde un local propio para grabar contenidos en streaming, o una gaming house con espacio propio para la producción, o incluso oficinas que incluyan estas opciones. Lo que sí está definido es que será un espacio abierto a comunidad y marcas para generar contenido y activaciones. “Va a ser una de las líneas que más trabajemos, tener espacios físicos para crear contenidos y ofrecer un valor extra a las marcas que están entrando”, sostiene Villoria.
Falcons espera concretar la firma de diferentes patrocinadores en los próximos meses, aunque por ahora ninguno está cerrado. El directivo señala que, de lograr la entrada de estas marcas, “completaremos el año con los objetivos que nos habíamos marcado y no hará falta recurrir a una nueva ampliación de capital”.
El año pasado el futbolista del Chelsea y otros socios del club inyectaron casi 313.000 euros para financiar los nuevos proyectos. Parte de los fondos se emplearon para lanzar su vertical de creadores de contenido, que se ha potenciado con incorporaciones para los videojuegos de LoL y Gran Turismo. Desde Falcons no revelan el presupuesto y los ingresos que esperan lograr en 2022, pero sí que hacer break even está previsto, como pronto, en 2023.
“Todo va a depender de las marcas que vayan entrando como patrocinadores”, adelanta Villoria. “Si aumentamos los ingresos iremos en la hoja de ruta marcada para el proyecto a cuatro años vista, hasta 2024”. Como otros clubes al iniciar su andadura, Falcons asumirá pérdidas durante los primeros tres ejercicios. En los dos primeros años han sido compensadas gracias al músculo financiero de sus accionistas y el objetivo es que desde 2022 se avance hacia el equilibrio gracias al patrocinio.
El resto de vías de ingresos aún están en fase de desarrollo. Además del gaming center, se han potenciado las líneas de merchandising a través del lifestyle. El club tiene como patrocinador a Adidas, una prolongación de su acuerdo con Azpilicueta. Su negocio se gestiona desde Smarketing, socio de la firma alemana en España, que se encarga de la relación y entrega de productos, pero que a diferencia de Futbol Emotion y otras marcas como Kappa permiten al club gestionar su ecommerce y una mayor personalización en la estrategia.
Por otro lado, en marzo se lanzó su primer abono digital, que irá de la mano de su estrategia de eventos. “Es una nueva línea que está en fase embrionaria, con la que empezaremos a crear contenidos para abonados y con la que a medida que se reactiven las citas presenciales queremos vincular para darles acceso, llevarlos al stand y organizar activaciones con marcas”, explica Villoria.
Finalmente, la entrada en LoL, aunque no estaba prevista, no supondrá grandes cambios en el presupuesto. “Se presentó la oportunidad y la aprovechamos porque era un paso natural”, destaca. Falcons nació vinculado únicamente a simuladores deportivos, por lo que es su primera incursión fuera de este ecosistema de eSports. El equipo no desvela el presupuesto para Segunda División, aunque sí que “está muy por debajo de los clubes que buscan ascender, porque nos hemos enfocado como equipo de formación para desarrollar talento español”.
Azplilicueta también ha lanzado recientemente un nuevo proyecto: la agencia Dave. Se gestiona de forma independiente de Falcons y busca ser un primer conector para marcas o nuevos clubes que quieren entrar en los eSports. “Hemos visto que hay una necesidad importante por el desconocimiento que aún existe y el interés que sigue despertando”.
