Saski Baskonia es uno de los clubes con más tradición del baloncesto español. El club ha sido uno de los pocos capaces no solo de pelear en ACB con dos colosos como FC Barcelona y Real Madrid, sino de hacerlo en Euroliga, alcanzando la Final Four en dos ocasiones. Josean Querejeta, su máximo accionista y presidente, es el dirigente más longevo del baloncesto español y este mes ha alcanzado los 35 años al frente de una organización que hoy trasciende a la canasta, siendo el pilar de un grupo del que también forman parte Deportivo Alavés, el centro deportivo Bakh y la universidad del deporte Euneiz.
Querejeta tomó las riendas del Baskonia el 27 de octubre de 1988 después de colgar las botas como jugador profesional. El principal reto fue profesionalizar su estructura con el patrocinio de TAU, que duraría más de dos décadas. Querejeta convirtió al club en Sociedad Anónima Deportiva (SAD) y en la segunda mitad de los noventa situó al club en la élite de España con jugadores como Pablo Laso, Velimir Perasovic, Marcelo Nicola o Ramón Rivas, entrenados por Manel Comas.
En 1995, la entidad gasteiztarra ganó su primer título, la Recopa de Europa, y en los años posteriores caerían otros trofeos en España. Su palmarés incluye cuatro ligas ACB, seis Copas del Rey, cuatro Supercopas y dos apariciones en la Final Four de la Euroliga, competición de la que es uno de los trece clubes fundadores y propietarios. Querejeta, de hecho, fue de los que más apostó por la competición continental en pleno enfrentamiento contra la Fiba. En 2015, con el cambio al sistema de licencias, se aseguró la de categoría A por delante de Unicaja.
Más allá de los éxitos deportivos, Querejeta ha posicionado a Vitoria como una ciudad de baloncesto. Logró llevar la Final Four de la Euroliga a su ciudad en 2019, generando un impacto económico de 56 millones de euros, según los datos del club. Era el principal evento deportivo internacional albergado en el País Vasco hasta la llegada del Tour de Francia este 2023 y las finales de la Champions femenina y la Europa League, que se disputarán en Bilbao en 2023-2024 y 2024-2025, respectivamente.
En términos de negocio, Baskonia era hasta ahora el único club aparte de Madrid y Barça que superaba los 10 millones de euros anuales. El club tiene un presupuesto próximo a los 15 millones de euros y, a diferencia de ambas potencias deportivas, no depende del fútbol para financiarse. De hecho, hasta la fecha es la única entidad que ha jugado las cartas a la inversa: Querejeta y Baskonia son el único club de baloncesto que han comprado uno de fútbol: el Deportivo Alavés en 2013, para salvarlo de la quiebra.
Hoy el Alavés es un club completamente saneado, que ha vuelto a lograr el ascenso a LaLiga EA Sports y genera un negocio de en torno a 70 millones de euros. Además, a cierre de 2021-2022 contaba con fondos propios y patrimonio neto de más de 16 millones, una caja que ha sido la clave para acometer nuevos proyectos más allá del deporte profesional para diversificar su negocio.
Querejeta ha sido de los pioneros en el deporte español en apostar por nuevas vías de ingresos. Primero lo hizo con el Bakh, su instalación deportiva que da servicio tanto a la ciudadanía como a sus equipos profesionales. También se ha embarcado en el proyecto de crear su propia universidad, que fue aprobada por el Parlamento Vasco hace dos años.
En paralelo, ha impulsado su propio hub de innovación para captar start ups y trabajar con empresas en nuevos negocios que puedan generar más ingresos. Esa es la gran obsesión en la entidad azulgrana: no depender exclusivamente del negocio que genera el deporte para la supervivencia del club.
Todo ello sin descuidar al aficionado, al que ha recuperado tras la pandemia con una oferta de entretenimiento única en la ACB. Baskonia ha organizado conciertos previos a los partidos, realizado activaciones con patrocinadores e invertido para que el Buesa Arena no solo sea el pabellón con más capacidad de España aparte del WiZink Center, sino también una de las instalaciones más innovadoras tecnológicamente. El concepto de entretenimiento ha fusionado ambos territorios y han convertido al club en un referente dentro y fuera de España.