El Shakhtar Donetsk mueve ficha tras el primer aniversario de la invasión de Rusia a su país, que cortó de golpe su desarrollo deportivo y económico, donde culpa, en parte. El club ucraniano reclama a la Fifa 40 millones de euros en concepto de indemnización. ¿El motivo? Los perjuicios ocasionados en su negocio por la decisión unilateral del regulador del fútbol mundial de liberar de sus contratos a los futbolistas extranjeros que jugaban en Ucrania cuando estalló la guerra. Tras ser rechazado por el TAS, ahora la entidad ha denunciado el caso ante la Comisión Europea.
La medida golpeó especialmente al Shakhtar, un club de Champions League que en las dos últimas décadas se había hecho un hueco en el fútbol europeo como captador de talento joven brasileño que, gracias a la exposición en Champions, después vendía a clubes de las grandes ligas del Viejo Continente obteniendo cuantiosas plusvalías. Este modus operandi se partió por la guerra, y la entidad denuncia que la medida de la Fifa le ha perjudicado especialmente. Ahora el organismo se plantea prorrogar dicha medida hasta 2024.
En concreto, denuncia al organismo que rige el fútbol mundial por, presuntamente, “violar la legislación de la Unión Europea en materia de competencia”, apunta el director general del Shakhtar, Sergei Palkin.
“Como club, hemos experimentado la parcialidad y la injusticia inherentes al sistema jurídico del fútbol internacional, un proceso que carece de integridad y transparencia y que claramente no es adecuado para su propósito. La Fifa ha creado un sistema que le permite influir en el resultado de las decisiones del TAS, por lo que pedimos al fútbol internacional que se una y reforme los procedimientos jurídicos y las normas de gobernanza de nuestro deporte. El TAS debería estar protegido de la influencia de todas las partes externas -incluida la FIFA- y ser capaz de resolver los casos de forma independiente y con total imparcialidad y justicia”, afirma Palkin en un comunicado.
