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Un ‘showroom’ llamado Super Bowl: así es el negocio que rodea a uno de los eventos del año

Se espera que el evento deje 500 millones de dólares en Nueva Orleans, una ciudad que ha albergado la cita en otras diez ocasiones. El precio medio de la entrada supera los 9.000 dólares.

Chiefs   Eagles Superbowl 2023. Fotografía de Kevin Sabitus (NFL)
Chiefs Eagles Superbowl 2023. Fotografía de Kevin Sabitus (NFL)

Año tras año, la industria del deporte mira a Estados Unidos para ser testigos de uno de los eventos del año: la Super Bowl. Como en 2023, este año volverá a medir a los Philadelphia Eagles y los Kansas City Chiefs, que de la mano de Patrick Mahomes y Travis Kelce buscan lo que nadie antes ha logrado en la NFL: ganar tres campeonatos consecutivos. El escenario será el Caesars Superdome de Nueva Orleans, una ciudad que ha albergado este evento otras diez ocasiones. Pero, ¿qué impacto tendrá la cita y cuánto cuesta disfrutar el evento in situ?

 

¿Qué impacto económico dejará en Nueva Orleans la Super Bowl?

La última vez que Nueva Orleans fue sede de la Super Bowl, el evento dejó un impacto económico de 480 millones de dólares (460 millones de euros). Se espera que la cifra de este año exceda ese umbral y supere los 500 millones de dólares (580 millones de euros), según han comunicado las autoridades locales.

“Estoy deseando que llegue la Super Bowl, no porque me guste el fútbol, sino porque somos la primera ciudad que convierte la Super Bowl en una cumbre empresarial de una semana de duración”, ha afirmado Susan Bourgeois, secretaria de desarrollo económico de Luisiana. El evento espera atraer a 125.000 visitantes a la ciudad, entre espectadores del partido y aficionados que acuden a todas las actividades programadas por patrocinadores y marcas que buscan capitalizar el imán que supone este evento.

 

¿Cuánto cuesta una entrada y el merchandising para la Super Bowl?

No todos los visitantes viajarán a Nueva Orleans con entrada. Es más, la cita tendrá lugar en el Caesars Superdome, un estadio con capacidad para 83.000 espectadores. El precio medio de los tíquets se sitúa en algo más de 9.400 dólares (9.021 euros), con un precio de partida que supera los 5.240 dólares (5.028 euros). La entrada más cara ya cuesta 52.575 dólares (50.455 euros), según Ticket IQ.

A ello hay que sumar los palcos VIP. El Caesars Superdome cuenta con 64 palcos, con un precio de salida de 750.000 dólares (724.000 euros). El más caro cuesta 2 millones de dólares (1,9 millones de euros). En algunos casos, son los propios jugadores los que contratan dichas suites para que sus familiares y amigos puedan seguir el partido. Sin ir más lejos, el jugador de los Chiefs, Travis Kelce, pagó 3 millones de dólares (2,9 millones de euros) por un palco en la pasada Super Bowl, que se disputó en el Allegiant Stadium. Era el box más caro del estadio, y en el se citó su familia, amigos y la cantante Taylor Swift, pareja del jugador. Estos palcos ofrecen parking prioritario en el recinto, catering, baño privado, asientos al aire libre y bajo cubierto.

Kendrick Lamar pondrá la música en el descanso durante el halftime show, que cuenta con el patrocinio principal de Apple Music, y en el que también participará la cantante SZA. Entre los dos suman 17 premios Grammy. Entre los espónsors del halftime también están Pepsi, Oscar Mayer y E-Trade. 

 

El gasto que rodea a la Super Bowl... sin acudir a la Super Bowl

Pero el gasto no se limita a quienes tienen la suerte de conseguir entradas para ver el evento en directo. La Super Bowl es una fecha tan señalada en el calendario de los estadounidenses como la Navidad. Tanto es así, que las familias cuentan con un presupuesto reservado para disfrutar del evento desde casa. La National Retail Federation estima que el año pasado los norteamericanos gastaron 17.300 millones de dólares (16.600 millones de euros) en comida, bebida, merchandising y artículos de decoración para organizar fiestas con motivo de la Super Bowl LVIII. Fueron 1.000 millones de dólares (960 millones de euros) más que en el año anterior.

 

 

Entre los productos más consumidos, snacks, comida para dipear, pizza y bebidas con alcohol, según un informe de la consultora Consumers Digets. De ahí que marcas como Doritos, Pringles, Häagen-Dazs o Budweiser cada año inviertan varios millones de dólares en campañas de publicidad coincidiendo con el evento.

 

Los patrocinadores y anunciantes  del evento

FOX, que emitirá el partido en Estados Unidos, admite que en noviembre ya había vendido todos los espacios publicitarios vinculados a la retransmisión del evento, entre ellos un anuncio de 30 segundos por 8 millones de dólares (7,7 millones de euros). Lo cierto es que algunos de los anuncios vinculados al evento no están impulsados por marcas patrocinadoras de la NFL. Entre los espónsors están FedEx, P&G; los televisores TCL, Toyota o Invisilign, que da nombre al premio MVP.  También está el ron Captain Morgan, que ha llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento de Nueva Orleans para cambiar el nombre de la mítica y céntrica calle Bourbon Street a Rum Street durante la semana del evento.

 

 

 

Audiencias, horarios y dónde ver la Super Bowl 2025

A los 125.000 visitantes que viajarán a Luisiana, se sumará el impacto mediático del evento, que se espera que sea seguido por 210 millones de personas en todo el mundo. La Super Bowl de la pasada temporada la siguieron de media 123,7 millones de espectadores en Estados Unidos, según Nielsen. Fue la final más vista de la historia de la NFL. En 2023, cuando los Eagles y los Chiefs disputaron la Super Bowl, el partido fue visto por 115,1 millones de personas. En España el partido podrá seguirse a partir de las 00:30 horas de la madrugada del domingo al lunes 10 de febrero a través Movistar+ y con el NFL Game Pass que se contrata en Dazn.

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