El Perú Cáceres Wellness se apoya en la tecnología para personalizar la experiencia de sus clientes. El club, que ocupa un espacio de 27.000 cuadrados en la ciudad extremeña, afrontó la pandemia en un momento en que atendía a un 6% de la población cacereña. El cierre de instalaciones le obligó a abrazar con más fuerza que nunca el servicio online, después de trece años de crecimiento constante fiando su servicio a la experiencia presencial. Y, en ese proceso, la tecnología fue fundamental.

“Nosotros ya nacimos como un centro digital y apostamos por Technogym porque en 2007 era el único operador que ofrecía este servicio; nos reportaba mucha información sobre el cliente; ahora esto ha ido mucho más allá”, explica Jorge Azcona, director general de El Perú Cáceres Wellness. El complejo se puso en marcha hace catorce años con una inversión de doce millones de euros, y desde 2007 ha destinado algo más de 2,2 millones para poner a punto el club.

Se amplió de tres a siete pistas de pádel, y una de ellas se transformó en un centro de gimnasia rítmica, un guiño al deporte federado que también ha hecho con el club de natación y de pádel. El cambio principal fue en 2018-2019, cuando se hizo una reforma integral de la sala de fitness, se apostó por espacios de entrenamiento grupal y se habilitó una zona de funcional en el exterior.

La pandemia obligó a hacer una nueva actualización. “Reubicamos 1.200 metros cuadrados, ganamos 400 metros en el exterior para hacer actividades dirigidas y convertimos dos salas de dirigidas en espacio para entrenamiento de fuerza y estiramientos”, explica Azcona. También se reconvirtió la sala de conferencias y conciertos en espacio para actividades dirigidas.

El Perú Cáceres Wellness se puso en marcha en 2007 y, desde entonces, se han invertido algo más de 2 millones en mejorar la instalación

“Algunos cambios van a permanecer y otros no; esperamos que 2022 sea un año mejor que 2021, pero no alcanzará los niveles de 2019”, explica el directivo. Antes de la pandemia, la compañía facturó 2,9 millones de euros, y, en lo que va de 2021, está facturando un 21% más que en 2020.

El directivo reconoce que la recuperación del volumen de clientes tras la pandemia depende de la personalización y de ofrecer una batería de servicios amplia. De ahí que el gimnasio cuente con club deportivo para atender a los aficionados al deporte federado y al público infantil, por ejemplo. “El éxito pasa por la combinación de servicios y ofrecerlo todo incluido”, afirma.

Conocer al perfil de cliente es clave en todo tipo de negocio, y El Perú Cáceres Wellness ha apostado por el CRM Wellnes de Technogym para cubrir esta necesidad. “Su tecnología nos permite conocer el estado en el que el cliente llega al club; la monitorización ayuda al seguimiento, al rendimiento y permite la motivación de los socios”, recalca.

No es una cuestión menor, y apunta a ser una de las claves de futuro. “El modelo de centro deportivo del futuro es una instalación de educación temprana deportiva, lo imagino como un centro de día para mayores donde se conecta a las personas y se ayuda a la salud mental; veo una clara evolución del wellness a la salud”, subraya.

“La recuperación completa “niveles prepandemia” estimamos que la alcanzaremos probablemente en octubre del 2022”, afirma el directivo, tras un septiembre que califica como “un buen mes”. “Detectamos que la vuelta al colegio después de la ola veraniega no genera el mismo miedo que el año pasado siendo un dato importante que los cursos deportivos de natación, pádel y gimnasia rítmica no solo han remontado el 2019, sino que la cifra es un 12% más que dicho año”, añade.