Las apuestas deportivas salen a flote en España tras el confinamiento, al calor del fútbol y un verano cargado de eventos en directo. El aplazamiento de las competiciones obligó a que concluyeran pasado junio, lo que provocó un efecto rebote en un tercer trimestre que tradicionalmente suele ser más flojo para el sector. Las cantidades jugadas rozaron los 2.000 millones de euros entre julio y septiembre, el doble respecto al trimestre anterior, condicionado por el encierro domiciliario, y un 18% más que en el mismo trimestre de 2019.

Pero el efecto rebote no se queda ahí. El tercer trimestre de 2020 ha sido el mejor en términos de negocio para el sector de las apuestas deportivas desde finales de 2018. Esa fue la única vez que se superó la barrera de los 2.000 millones en ingresos, según los últimos datos disponibles en la Dirección General de la Ordenación del Juego (Dgoj).

La tendencia es aún más llamativa teniendo en cuenta que entre abril y junio de 2020, en pleno confinamiento, las casas de apuestas dejaron de ingresar 1.000 millones de euros respecto a la media habitual. Lo que entonces suponía volver a niveles de 2015, hoy equivale a acariciar un nuevo récord.

Pese a este efecto rebote, en el acumulado del año (enero-septiembre), las apuestas deportivas movieron 4.538 millones de euros, un 15% menos que en el mismo período del año anterior. Es decir, que el boom logrado con el regreso de las competiciones a puerta cerrada aún no les permite compensar los tres meses anteriores de parón. Ahora bien, de mantener la tendencia al alza en el último tramo del año, los operadores del juego cerrarían 2020, como mínimo, con una cuota de negocio similar a la de 2019, superando de nuevo la barrera de los 7.000 millones de euros.

Donde sí se ha notado el impacto ha sido en el gross gaming revenue (GGR), una métrica empleada en el sector que refleja la diferencia entre el dinero que se gasta en apuestas y lo que se entrega en premios, equivalente al margen bruto de las empresas. La industria obtuvo un resultado de 264 millones de euros entre enero y septiembre, un 8,5% menos interanual, aunque la Dgoj no explica a qué se debe esta situación.

Todo ello mientras el Tribunal Supremo admite a trámite el recurso presentado por la patronal Jdigital sobre el Real Decreto de Comunicaciones Comerciales que limitará la visibilidad de este tipo de empresas en medios de comunicación y competiciones deportivas. Y es que a expensas de su entrada en vigor, el efecto rebote también se ha dejado notar en la inversión publicitaria y de patrocinio.

El gasto en campañas de marketing se situó en 51,8 millones de euros en los tres meses de verano, el triple en comparación con el presupuesto invertido durante el confinamiento y un 45% más en términos interanuales. La inversión supera ya los 128,5 millones de euros en el acumulado del año, un 3,5% más que entre enero y septiembre de 2019. En cuanto al patrocinio, la inversión es de casi 17 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 17% superior al mismo período de 2019. 

El patrocinio deportivo, sin embargo, se había comportado de manera diferente a la publicidad durante el confinamiento, mostrando una mayor resiliencia. Uno de los motivos podría encontrarse en los acuerdos firmados o renovados por las entidades deportivas en previsión de la nueva regulación, que obliga a poner fin a la visibilidad en camisetas y otros soportes físicos una vez finalice la temporada 2020-2021, lo que aceleró numerosas negociaciones para terminar de definir la relación con las propiedades deportivas en el nuevo contexto.

El sector de las apuestas es el undécimo que más inversión publicitaria realiza en España, según los últimos datos de InfoAdex, publicados antes de la pandemia. La mayor parte se concentra en el ámbito deportivo, aunque los datos también incluyen los 51 millones de euros que se estima que invirtió Once en 2019, situada en noveno lugar del ránking de empresas, y los 77 millones de euros de Loterías y Apuestas del Estado, sólo es superado en inversión publicitaria por El Corte Inglés y Volkswagen. Ambas corporaciones han quedado excluidas del nuevo decreto de regulación.

Otro indicador del impacto de la Covid-19 sobre las apuestas deportivas se encuentra en el número de cuentas. En el segundo trimestre de 2020 se crearon un total de 330.262 nuevos usuarios, casi el triple que en entre abril y junio. No sólo eso, sino que se ha registrado un nuevo récord de nuevos usuarios registrados, con una media de 110.000 nuevas cuentas mensuales en el tercer trimestre. 

El total de cuentas activas se situó en 881.755, aún lejos de los topes con los que se cerró 2019, un año en el que se estuvo a punto de rebasar por primera vez los 1.000 millones de cuentas activas. Es decir, pese al rebote en volumen de negocio y número de cuentas, la pandemia se ha comido casi 100.000 usuarios.