El Covid-19 también pasa factura al sector de las bicicletas. Shimano ha cerrado los nueve primeros meses de 2020 con una caída en las ventas del 2%, hasta 264.174 millones de yenes (2.130 millones de euros). Su beneficio neto, sin embargo, aumentó un 10,4%, hasta 47.268 millones de yenes (381 millones de euros).

“A pesar de que las medidas se relajaron en Europa durante el verano, no hay evidencias de que la pandemia vaya a remitir y la preocupación por la situación económica es profunda, lo que repercute en una menor demanda”, ha indicado la compañía en la presentación de sus últimos resultados.

El boom de las ventas en Europa y Norteamérica ha sido clave para contener el impacto de la Covid-19. Aun así, la venta de este tipo de vehículos ha decrecido un 3,8% en términos globales, hasta 204.499 millones de yenes (1.649 millones de euros) y el beneficio operativo de este segmento se desplomó un 22,3%, hasta 10.263 millones de yenes (82,7 millones de euros).

La venta de bicicletas equivale al 77,4% de la facturación del grupo. El resto procede, principalmente, de su negocio de pesca y de otros segmentos, cuyos ingresos cayeron un 5% y un 7,5%, respectivamente. De cara al cierre del ejercicio fiscal, Shimano ha reajustado sus previsiones, que han pasado de 370.000 millones de yenes (2.983 millones de euros) a 350.000 millones de yenes (2.822 millones de euros), un 3,6% menos que en 2019.