Mizuno mantiene su tendencia de crecimiento. El fabricante japonés de artículos deportivos ha cerrado los tres primeros trimestres de su ejercicio fiscal (de abril a marzo) con una facturación de 147.400 millones de yenes (1.047 millones de euros), un 18,1% más que en el mismo periodo de 2021.
Por otro lado, su beneficio neto se situó en 7.800 millones de yenes (55,4 millones de euros), que contrasta con los 6.100 millones de yenes (46,3 millones de euros) que ganó en el mismo periodo del año anterior. Es decir, el beneficio ha experimentado un auge del 28,3% en los últimos nueve meses.
El mercado japonés sigue liderando las ventas, que ya suponen 89.800 millones de yenes (638 millones de euros) de la facturación de Mizuno, el 60,9% de las ventas totales de la compañía. En este mercado mejoró sus ventas un 13% interanual. Le siguió América, que generó ingresos por valor de 22.900 millones de yenes (162 millones de euros), un 24% más; Asia Oceanía, donde vendió equipamiento por 17.600 millones de yenes (95 millones de euros), un 40% más; y Europa, donde se facturaron 17.200 millones de yenes (122 millones de euros), un 22% más.
Por líneas de negocio, el calzado es el que más negocio aporta, tras disparar sus ventas un 24%, hasta 43.800 millones de yenes (311,2 millones de euros). A la zaga le sigue el equipamiento, con unas ventas de 40.700 millones de yenes (289,1 millones de euros), un 19% más interanual, mientras que el textil creció un 11,8%, hasta 39.700 millones de yenes (282,05 millones de euros).
La compañía ha destacado que los ingresos se han visto impulsados por el crecimiento del negocio del golf, además de la recuperación del calzado de fútbol, béisbol y deportes de raqueta. Por otro lado, se han alcanzado cifras récord de facturación y beneficio neto en el tercer trimestre. En total, se han logrado unos ingresos de 48.200 millones de yenes (342,4 millones de euros) y un beneficio de 1.400 millones de yenes (9,9 millones de euros).
