Nike coge carrerilla, pero continúa sufriendo la crisis global que afecta a las principales multinacionales. El gigante de la distribución deportiva cerró su primer semestre fiscal – que va del 30 de mayo al 30 de noviembre- con unos ingresos de 26.002 millones de dólares (24.472 millones de euros), un 10% más que en el mismo periodo del año anterior. A pesar de ello, la compañía deportiva recortó su beneficio un 12,8%, hasta 2.799 millones (2.634,3 millones).
En el segundo trimestre Nike cogió carrerilla y facturó 13.315 millones de dólares (12.531 millones de euros), un 17% más interanual y su mejor registro de la década durante este periodo. La firma estadounidense logró esta subida en el volumen de negocio con apenas un incremento de un 8% de los gastos de captación de demanda. Además, en el segundo trimestre fiscal, Nike logró frenar la caída en el beneficio que venía sufriendo durante los últimos trimestres y ganó 1.331 millones de dólares (1.252,7 millones de euros), tan sólo un 0,45% menos interanual.
“Los resultados de Nike de este trimestre son una prueba de nuestra profunda conexión con el consumidor”, ha remarcado John Donahoe, consejero de delegado de la empresa. “El crecimiento durante este periodo ha estado liderado por nuestro negocio digital y la fortaleza de nuestra marca. Además, estos resultados nos dan confianza para afrontar un nuevo año”, ha añadido.
El inventario de Nike durante este periodo se ha disparado un 43% interanual, como consecuencia de los problemas derivados de la crisis logística y de suministró que se vivió a nivel mundial el pasado año. “Seguimos centrados en lo que podemos controlar, y estamos en el camino correcto para alcanzar nuestros objetivos operativos y financieros”, ha remarcado Matthew Friend, vicepresidente ejecutivo y director financiero.
Sube la actividad en China
Esta mejora se debe en parte a la recuperación de la actividad en China, donde las ventas pasaron de caer un 16% en el primer trimestre a un 4% en el segundo. En esta región, los ingresos de la compañía en el primer semestre han alcanzado los 3.444 millones de dólares (3.241 millones de euros). América del Norte continúa siendo el principal mercado para la multinacional que, con una facturación de 11.340 millones de dólares (10.642,9 millones de euros), concentra un 50% del negocio del grupo. En esta región los ingresos acumulan una subida de un 21% en el actual ejercicio fiscal.
A pesar de estos buenos resultados de Nike en América del Norte donde más suben las ventas en el acumulado del año es en Europa, África y Oriente Medio (Emea) y Asia y Lationoamérica. En ambos mercados la facturación se disparó un 25%, alcanzando los 6822 millones de dólares (6.420,7 millones de euros) y los 3.134 millones de dólares (2.949 millones de euros) respectivamente.
Por categoría de producto, las ventas estuvieron lideradas por el calzado, que sigue concentrando un 67% del negocio de Nike, con un aumento de un 23% de los ingresos, que alcanzaron en el primer semestre los 16.618 millones de dólares (15.640 millones de euros). Le siguen por cuota de mercado las prendas deportivas y los accesorios. La facturación de Nike a través del canal digital repuntó un 25% durante este periodo.
De cara a los próximos trimestres fiscales, Donahoe ha destacado que “nos centraremos en lo que podemos controlar y adoptamos un enfoque comedido frente a un panorama macroeconómico que es incierto. En consecuencia, vamos a reforzar nuestras compras en el segundo semestre y a liquidar el exceso de inventario de forma más agresiva a partir de este segundo trimestre”.
