El Granada CF muda de piel. El club nazarí de LaLiga Santander vestirá de Adidas a partir de la próxima temporada, con un contrato de cinco temporadas (2022-2027) en las que aproximadamente cobrará dos millones de euros y recibirá material valorado en 1,5 millones más en todo el periodo, según ha podido saber 2Playbook.
Es decir, que el club se ha asegurado 700.000 euros por temporada entre todos los conceptos. Se desconoce el importe de compra obligatoria de producto, que suele marcar la rentabilidad real de estos contratos, si bien las fuentes consultadas indican que el saldo será claramente favorable al club.
El contrato, de larga duración, pone fin a un trienio de alianza con otro gigante del retail deportivo como Nike, que en los últimos meses ha perdido una parte importante de su estructura en España, afectando al servicio que presta a clubes de menor tamaño. Ahora será la marca alemana la que equipe al club rojiblanco, que aspira a aprovechar esta nueva pareja de baile para crecer internacionalmente y mejorar en el desarrollo de su estrategia global de marketing.
Fuentes del club explican a este medio que se trata de “una alianza estratégica”. En el ámbito internacional, “nos ofrecerá su estructura para nuestra distribución en los mercados clave para el desarrollo de la estrategia de internacionalización”. Estas regiones son Asia –la propiedad del club, DDMC, es China–; Europa, norte de África y Oriente Medio (Emea), y Latinoamérica.
En la región de Emea, desde el club destacan la asociación cultural con la icónica Alhambra, y no hay que olvidar la fortaleza del Granada en Latinoamérica, origen de varios de sus jugadores franquicia: los colombianos Carlos Bacca y Luis Suárez; o el venezolano Darwin Machís. En 2020-2021, y pese al golpe que ha supuesto la pandemia en todas las líneas de negocio, las ventas en tienda superaron los 1,4 millones de euros, según se recoge en sus cuentas anuales.
Al respecto del diseño, en Granada valoran muy positivamente la disposición de Adidas de realizar colecciones exclusivas y diseños de líneas que estén vinculadas con la historia del club. Además, “nos generará nuevas posibilidades de expansión de la marca, tanto de forma física como vía ecommerce, a través de líneas más globales y urbanas para targets masculinos y femeninos”, destacan las mismas fuentes.
En definitiva, el Granada valora la fortaleza de Adidas, “una de las marcas que mejor conoce el mercado core del club, así como el negocio retail, generando un expertise en su gestión”. De momento, Mark FC continuará gestionando el negocio retail del club durante 2022-2023, pues no se acompasó su contrato con el de Nike, si bien la vocación de la nueva dirección es asumir directamente la explotación de todos los negocios para tener un mayor conocimiento del consumidor.
Adidas completa su particular XI en el fútbol español
Para Adidas, el acuerdo con el Granada supone completar su particular XI en LaLiga. La punta de lanza de la marca alemana en el fútbol español sigue siendo el Real Madrid, con un contrato de 1.100 millones de euros fijos entre 2020 y 2030, contabilizando el fee con el negocio que generan las tiendas oficiales.
Tras los blancos, la compañía cuenta con una serie de acuerdos de larga duración con Real Zaragoza, RC Celta, Real Oviedo y CD Mirandés. En 2020 se reforzó con CA Osasuna, tal y como avanzó 2Playbook, y Burgos CF; y un año antes captó al Real Valladolid y la SD Ponferradina.
A ellos se suma, fuera de la industria de los clubes, el histórico contrato de Adidas con la Real Federación Española de Fútbol (Rfef). La compañía alemana trabaja algunos de estos contratos junto a Smarketing, que gestiona, entre otros, su acuerdo con La Roja.
La rentabilidad en 2021-2022, fiada a las plusvalías por traspasos
El Granada salvó el año de la Covid, pero tiene deberes económicos para esta temporada. El club andaluz cerró 2020-2021 con un beneficio de 3 millones de euros, impulsado por su participación en Europa League, compensando así las pérdidas de un millón con que finalmente concluyó el ejercicio previo. La razón no es otra que la reclasificación de determinados ingresos y las quitas asumidas por LaLiga con algunas televisiones.
Para 2021-2022, la entidad cuenta con un presupuesto de 60 millones de euros. Y mantener la sostenibilidad económica de los dos primeros años de pandemia (en agregado, unas ganancias de dos millones) dependerá del plan de ajuste en marcha y posibles traspasos.
De momento, el primer semestre se completó con una cifra de negocio de 31,95 millones de euros, una caída del 28,3% que se explica por la ausencia de ingresos procedentes de Uefa, ya que el conjunto nazarí sí disputó Europa League un año antes. De hecho, los ingresos audiovisuales recogen el principal retroceso, del 36%, hasta 25,88 millones de euros.
Los ingresos comerciales fueron prácticamente un tercio respecto a los del primer semestre del curso anterior, pasando de 1,91 millones a 698.452 euros, puesto que el Granada CF es de los que perdió su main sponsor por la nueva regulación del juego y no fue hasta enero que se pudo sellar la entrada de Platzi como patrocinador principal. Por el contrario, los ingresos por publicidad han subido un 39% por la mejor explotación de la U televisiva, hasta 3,2 millones.
Para el conjunto del año, Patricia Rodríguez, directora general del club, destacó en la presentación de resultados que los derechos audiovisuales aportarán un 85%, en torno a 51 millones; los patrocinios, un 10% (6 millones), donde se incluye el patrocinio principal de Platzi; y los abonos y el ticketing, el 5% restante, sobre 3 millones de euros. De momento, y frente a la nula aportación del matchday en 2020-2021, este curso ya van 1,62 millones de euros en abonos y 552.082 euros en taquilla.
Durante 2020-2021, el club realizó un desembolso de 28 millones de euros en fichajes de jugadores. Esta apuesta que no fue respondida con una nueva clasificación para Europa League, fue clave –según la directiva– para que el Granada arranque esta temporada con un fondo de maniobra negativo de 16 millones.
Para resolverlo, se ha trabajado intensamente en la reducción de los costes de plantilla, que en el primer semestre absorbió 18,3 millones de euros entre personal deportivo y de oficinas, lo que supone un recorte del 26,5% interanual. Así se absorbió el alza de una partida en la que poco podían hacer, la de amortizaciones de inmovilizado, que pasó de 4,81 millones a 5,79 millones de euros.
En este proceso de reestructuración económica, la entidad recurrió a una financiación de 4 millones “con un tipo de interés inferior al 4% –por debajo del que se está concediendo en el sector–, y a la reestructuración de costes generales del club”, destacó Rodríguez entonces.
