LaLiga echa atrás el intento de Real Madrid y Barça de registrar la marca El Clásico. La Oficina Española de Patentes y Marcas (Oepm) ha denegado de manera total la marca solicitada por ambos clubes al entender que existía un riesgo de confusión y asociación con ElClásico, marca registrada y que explota desde hace años la gestora de la competición, según ha podido saber 2Playbook.
El organismo, adscrito al Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, ha tumbado el registro de la marca en todas las clases que solicitaban Madrid y Barça tras una lucha que se inició hace tiempo. LaLiga planteó el pasado abril una batalla legal al considerar que es “el legítimo titular” de la marca, que previamente ya había registrado en numerosos países, y aporta un estudio de Gfk para defender esa asociación entre el término popularmente usado para referirse a este partido y la competición española.
Los dos equipos, tras años intentando bloquear los registros de LaLiga, presentaron a mediados del año pasado una marca con el término El Clásico en la parte inferior, el escudo del Real Madrid a la derecha y el del Barça a la izquierda. De este modo, trataban de diferenciarse de las enseñas protegidas por la competición, que se centran exclusivamente en la palabra.
“Evidencia su verdadero propósito, que nos es otro que el de monopolizar la denominación ELCLÁSICO en el tráfico económico, y obstaculizar a LaLiga en el desarrollo de su actividad comercial y la protección de sus signos distintivos”, sostenía el recurso de LaLiga, al que tuvo acceso este medio y en el que se calificaba de “mala fe” la manera de proceder de los dos equipos.
El objetivo de Barça y Madrid era utilizarlo en tres categorías de productos y servicios de la clasificación Niza: la número 9, que vendría a incluir todo lo relacionado con productos digitales y videojuegos; la número 25, que es la que blindaría el merchandising y ropa deportiva, y la número 41, que es la que les daría cierta exclusividad en el uso de la marca para la organización de partidos amistosos o incluso la creación de campañas al margen de LaLiga cuando se enfrenten en el campeonato doméstico.
Sin embargo, LaLiga consideraba que debía anularse la petición por diversas razones, entre ellas, que “originariamente, los primeros encuentros denominados ELCLÁSICO enfrentaban al Athletic Club de Bilbao y al Real Madrid CF, siendo hasta el año 2011-2012 el partido más repetido y que más rivalidad suscitaba entre dos equipos españoles”.
El recurso, de 350 páginas, ahondaba en esta idea con referencias a publicaciones en varios medios de tirada nacional, y sostenía que la denominación en cuestión “no hace referencia a los equipos de fútbol que lo disputan, ya que estos, han ido cambiando a la largo de la historia”, y que fue creado por LaLiga y que “lleva siendo empleado desde hace tiempo remoto para los miembros de su competición futbolística, y siempre en el marco competitivo futbolístico configurado por la propia Liga Nacional de Fútbol Profesional”.
En su momento, Barça y Madrid siempre se opusieron -mayoritariamente sin éxito- al discurso de la organización, alegando que El Clásico también se usaba para referirse a sus duelos en otras competiciones deportivas, como puede ser la Copa del Rey, la Champions League o la ACB. Ante esto, LaLiga ha presentado un estudio de la consultora Gfk en el que se indica que “2 de cada 3 españoles mayores de 15 años (67%) asocian la citada denominación a LaLiga, y que ese porcentaje sube al 80% entre los aficionados al fútbol. Un 71% sí corrobora que lo primero que les viene a la cabeza cuando escuchan este término es un partido liguero entre Barça y Madrid.
“Así las cosas, entendemos que estamos en disposición de afirmar con total rotundidad que la marca “ELCLÁSICO” tiene un origen empresarial claramente definido, LaLiga. Una denominación y una marca que históricamente y en la actualidad, ha sido identificada y asociada por el consumidor medio a LaLiga, como único organismo con competencia para organizar oficialmente este encuentro, y ello, con independencia de quienes sean los operadores o equipos de fútbol que lo disputan”, aseveraba el escrito elaborado por el despacho de abogados Casas IP.
En este punto, el recurso recordaba que la gestora del fútbol español “ha ido desarrollando distintas actividades comerciales, publicitarias y de marketing de acusada importancia con objeto de promocionar dicho enfrentamiento deportivo, creciendo día a día hasta conseguir atesorar una familia de marcas en ámbito nacional, europeo e internacional de acusada relevancia, grado de conocimiento y reputación”. Por ello, se considera que es la competición y no los clubes el “titular de un importante patrimonio marcario que ha conseguido dotar de distintividad y un alto grado de conocimiento, mediante el uso real, efectivo, profuso y prolongado en el tiempo de numerosas marcas que ostenta bajo su titularidad, destinadas primordialmente a la protección registral del signo “ELCLÁSICO” y todo lo que engloba este evento y fenómeno mundial”.
De lo que no hay duda, y es algo que Tebas jamás ha negado, es la importancia que tienen estos dos equipos en el crecimiento de la competición. En términos de negocio, Barça y Madrid representan aproximadamente un 40% de todos los ingresos recurrentes de LaLiga en un contexto normalizado, pues durante la pandemia son los que más sufrieron la pérdida de ingresos por matchday.
Y, si bien históricamente han ido muy parejos en cuanto a crecimiento, la entidad liderada por Florentino Pérez ha demostrado mayor capacidad para hacer sostenibles sus operaciones, incluso esquivando las pérdidas en pandemia. Por el contrario, el Barça ha asumido unas pérdidas de casi 600 millones desde 2019-2020 por su arriesgada política salarial y de fichajes desde la marcha de Neymar en 2017.
En clave política, este capítulo legal se une a los otros que ya mantiene abiertos la asociación de clubes con Barça y Madrid. Los dos equipos se mantienen como los únicos promotores de la Superliga junto a la Juventus, en un caso cuya resolución judicial se espera en las próximas semanas. Además, mantienen la batalla judicial para dejar en suspenso la entrada de CVC en el negocio de LaLiga, pese a que por el momento no han logrado que se adopten las medidas cautelares que solicitaban y que podían dejar en suspenso la alianza.