La WWE tumba al Covid-19, al menos, en sus cifras de negocio. La organizadora de eventos de lucha libre ha disparado beneficios en el tercer trimestre hasta los 47,3 millones de dólares (40,3 millones de euros) tras el desconfinamiento en Estados Unidos, según las cuentas publicadas por la empresa. El acumulado del beneficio neto de la compañía se situó en 118,2 millones de dólares (100 millones de euros).
Los ingresos de la WWE se elevó hasta los 221 millones de dólares (189 millones de euros) entre junio y septiembre, un 19% más interanual, principalmente, por el incremento de los ingresos por televisión. Esta partida creció un 38% en este periodo respecto a 2019, manteniendo la velocidad con la que camina en estos nueve primeros meses del año, y acaparando el 90% de los ingresos totales de la compañía.
La facturación por eventos en vivo, lógicamente, ha sufrido una caída prácticamente del 100%, pasando en el último trimestre de los 23,2 millones de dólares (19,8 millones de euros) de 2019 a los apenas 597.000 euros de este año.
En esta partida, el aumento de los ingresos en media se concentra en la venta de los derechos de televisión, que alcanzó los 132,4 millones de dólares (113 millones de euros) en el tercer trimestre, un 83,4% más, y acaparó el 66% del total de ingresos por este concepto. En el acumulado de 2020, la comercialización de derechos creció un 90%, hasta 398,5 millones de dólares (340,3 millones de euros).
El pay-per-view de su plataforma propia le reportó a la compañía. 47,8 millones de dólares (40,8 millones de euros) de junio a septiembre, un 8% más, y ya ha aportado 140,7 millones de dólares (120,1 millones de euros) en los nueve primeros meses del año, lo que supone una ligera caída del 1%.
Por otro lado, la WWE facturó 19,9 millones de dólares (16,9 millones de euros) por merchandising en el tercer trimestre, repartido casi al 50% los ingresos por productos con licencia y los provenientes del ecommerce. En lo que va de año, esta partida le ha granjeado 59,1 millones de dólares (50,4 millones de euros) a la compañía, en línea con lo facturado en 2019.
En cuanto a los gastos, la compañía ha informado de una inversión de 13,1 millones de dólares relacionados con el alquiler de la nueva sede de la WWE.
