La bicicleta sigue siendo uno de los bienes más cotizados por los españoles tras la pandemia. El crecimiento de la disciplina y su uso cada vez más protagonista entre los hábitos deportivos de la población ha disparado el gasto un 19% desde 2019. De este modo, el gasto total en bicicletas de los españoles fue de 389,4 millones de euros, según la Encuesta de Presupuestos Familiares publicada por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Es decir, un desembolso un 1% superior al de un año previo y rozando la cifra más alta de la serie histórica que fue de 390 millones, registrado en 2018.

Si bien se trata de un ligero incremento interanual, estas cifras no hacen más que confirmar el buen estado de salud de la industria de la bicicleta en España, puesto que ha logrado mantener al alza el valor de las ventas en bicicletas y accesorios en un ejercicio marcado por la crisis de suministros y el desajuste entre oferta y demanda.

Por su parte, el gasto medio por hogar se ha mantenido estancado en 20,45 euros, cifras similares a las de 2021 pero un 17% superior a la cantidad que destinaban las familias antes de la pandemia. Mientras, el gasto medio por persona también se mantuvo estable con respecto a 2021 y ya supone 8,28 euros por persona. Un incremento del 15% con respecto a 2019, pero aún por debajo de las cifras alcanzadas en 2018, el año que lidera la serie histórica en las tres categorías.

De hecho, a excepción del 2018 la tendencia del último lustro es al alza, en parte porque el ciclismo ha ganado adeptos en un momento de cambio en los hábitos de movilidad, sobre todo en el entorno urbano, y por el crecimiento de los nuevos hábitos deportivos al aire libre. No en vano, el desembolso total fue en 2022 más de 100 millones de euros superior al que se registró en 2017, lo que supone un 35% más. En cuanto al gasto por hogar y por persona, el incremento con respecto a hace cinco años fue de un 31% y un 32%, respectivamente.

Pese a mantener las cifras al alza, el estancamiento de 2022 va en consonancia con los resultados obtenidos por el mercado español que un ligero retroceso después de dos años de récord, tanto en facturación como en unidades vendidas.

El sector alcanzó una cifra de negocio de 2.714 millones de euros en España, un 6% menos que el año anterior, según el último informe publicado por la Asociación de Marcas de Bicicletas de España (Ambe) y Sportpanel. En lo referente al número de bicicletas vendidas la caída fue de un 13,6%, con 1,3 millones de unidades comercializadas.

Asimismo, Europa se ha resistido a que la industria de la bicicleta alcance su cénit y ha registrado un crecimiento del 7,4% interanual para sumar unos ingresos de 21.200 millones de euros en 2022. El principal retroceso que se produjo fue en el número de unidades vendidas ya que disminuyó un 14% hasta 14,7 millones de bicicletas en la Unión Europea y Reino Unido.

España no quiere quedarse a la cola del pelotón en la carrera de la bicicleta para encabezar la movilidad sostenible. Por eso, precisamente en 2022 se puso en marcha la Estrategia Estatal de la Bicicleta por parte del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), con el compromiso de invertir 500 millones de euros para incentivar su uso. El reto es continuar fomentando la bici como medio de transporte y poder dar respuesta a las necesidades del usuario ciclista. 

El uso diario y semanal de la bicicleta se ha disparado un 40,6% entre los españoles desde 2019, según datos del Barómetro de la bicicleta en España de 2022. En total, ya son 11 millones de personas las que montan en bici de forma habitual. “No estamos ante una simple explosión del uso de la bicicleta, se trata de un Big Bang, un crecimiento lento pero prolongado que ha hecho que nuestras ciudades sean irreconocibles comparadas con las de hace 15 años” señalaba a 2Playbook, Jesús Freire, presidente de la Asociación de marcas de Bicicletas de España (Ambe).

El gasto total en deporte, que se vio duramente golpeado durante 2020 como consecuencia de la crisis sanitaria y empezó a remontar en 2021, registró una considerable subida del 45,9% en 2022, alcanzando los 5.846,4 millones de euros. Esta cifra representa una mejora del 5% respecto al año previo de la pandemia, cuando se gastaron 5.564,1 millones de euros.