O Marisquiño recupera su ritmo de crecimiento tras dos años de parón. El festival de deportes urbanos celebrado en Vigo prepara la edición de 2022 con novedades tanto en sus fechas como en sus sedes. El evento ha recuperado el apoyo de la inversión privada y pública con un presupuesto de 1,5 millones de euros, un 87% superior al de la pasada edición, todavía muy limitada por la crisis sanitaria, tal y como explica a 2Playbook, su director Joako Ezpeleta.
El festival, que acoge las copas del mundo de Skate, Bmx, Dirt Jump y Basket 3x3, se celebrará entre el 11 y el 14 de agosto en diferentes sedes en el entorno de Vigo. Esto supone la ampliación del evento un día más con la inclusión del llamado Family Day. “Este año lo vamos ampliar al jueves para los talleres con los niños de 5a 16 años. La idea es poder ir alargando más días, ojalá que sea algún día a una semana” apunta el responsable.
La otra gran novedad es la deslocalización de las diferentes pruebas. Además del Puerto de Vigo, se habilitarán más sedes con el objetivo de optimizar el espacio y llevar el festival a cada vez más zonas de la ciudad. De este modo, la actividad volverá a la playa de Samil para la prueba de Skate, el centro Vialia acogerá el baloncesto 3x3 y el recorrido del descenso urbano se eleva para que salga desde la Fortaleza del Castro. “Es dónde nació el festival en 2001. Salimos de ahí y terminamos la prueba en la playa de El Berbés. El descenso se ha ampliado a 1km, antes eran 600 metros”, indica Ezpeleta.
“Una de las razones de deslocalizar es generar una economía circular que se mueva por toda la ciudad para generar riqueza en todos los sitios. Habrá más barras y más servicios. Además, estamos en el puente de agosto lo que puede atraer a mucha más gente”, agrega el directivo.
Tras hacer piruetas para mantener las dos últimas ediciones, el evento prevé recuperar el ritmo ascendente que alcanzaron hasta 2019, año en el que generó un retorno económico en la ciudad de entre 18 millones y 20 millones de euros, según datos aportados por las asociaciones de hosteleros de Pontevedra.
Ahora esperan volver a esas cifras y para ello contarán con el apoyo de las instituciones públicas, que le proporciona hasta 900.000 euros para albergar el evento, de los cuales 420.000 euros proceden del Concello de Vigo y alrededor de 300.000 euros de la aportación de la Xunta de Galicia. También cuenta con el apoyo del Puerto de Vigo, que le cede las instalaciones, y de la Zona Franca, que pone espacios y aporta 15.000 euros en concepto de patrocinio.
A ello hay que sumarle el papel de los patrocinadores y los ingresos propios que obtiene el festival por medio de los servicios de restauración, stands de actividades y las ferias. Respecto a los socios, cuentan con Red Bull como main sponsor, a Vialia y Nissan como patrocinadores oficiales con Superbock como cerveza oficial.
Atracción internacional y expansión del festival
O Marisquiño ha ido creciendo año a año en afluencia de público. Desde las primeras ediciones en las que convocaba a poco más de 2.000 personas en la playa de Samil hasta que el evento alcanzó su cénit en 2019, cuándo pasaron por el recinto 160.000 personas. Con la nueva estrategia de deslocalización de sedes la organización confía en incrementar en un 20% el número de espectadores que acudan a los distintos recintos en los cuatro días de festival.
“El público que recibimos es muy transversal y cada vez recibimos más turistas de otras partes de España” señala Ezpeleta. No obstante, el festival no solo se ha hecho un nombre en España ya que recibe aficionados a los deportes urbanos de países como Portugal, Inglaterra o Francia.
De cara a 2025, fecha en la que O Marisquiño cumplirá los 25 años, la organización se marca el objetivo de convertirse en el mejor festival de deportes urbanos del mundo. “Tenemos una estrategia escalonada para conseguirlo. Incorporaremos nuevas disciplinas en los próximos años y ojalá podamos llegar a los siete días de festival” agrega el directivo.
