El FC Barcelona cierra una de las carpetas judiciales que llevaba más años coleando. El club ha anunciado un acuerdo con Neymar por el que las dos partes “cierran de forma amistosa sus litigios”, según ha explicado la entidad en un comunicado. Entre todas las reclamaciones, había más de 60 millones de euros en juego, aunque aún no se han desvelado las implicaciones económicas que podría tener este acuerdo. 

El pacto se ha alcanzado extrajudicialmente, por lo que se evitará ir a juicio por las demandas cruzadas que existían: tres reclamaciones en la jurisdicción laboral y un procedimiento civil. En el comunicado se habla de “un acuerdo transaccional”, sin hacer referencia a cómo se han solucionado las reclamaciones económicas que iban ligadas a cada caso.

A finales de 2020, el actual futbolista del Paris Saint-Germain (PSG) continuaba reclamando el pago de los 43,65 millones de euros de la prima de renovación que el Barça decidió no abonar, según la Ser. El argumento del club es que ese importe iba ligado a aquel nuevo contrato, que quedó rescindido cuando el futbolista pagó los 222 millones de euros de su cláusula de rescisión.

De hecho, ahí el club ahora presidido por Joan Laporta logró una primera victoria, ya que un juez reconoció que la prima de renovación formaba parte del salario del futbolista y, en base a lo que marca el convenio colectivo, hizo un prorrateo proporcional sobre el tiempo efectivo en que restó sus servicios.

Por ello, condenó a Neymar a devolver 6,7 millones, a los que la entidad deportiva sumó más tarde la reclamación de 10,2 millones de euros. Ese importe era el que le reclamaba la Agencia Tributaria por haber retenido menos impuestos de los que correspondían al delantero brasileño, según informó El Mundo el pasado noviembre.