Publicidad

El Chelsea FC pierde otros 138 millones en 2021-2022 pese a aumentar sus ingresos un 11%

El club londinense, que acumula un agujero de 251 millones de libras (285 millones de euros) entre 2019 y 2022, atribuye parte de los números rojos al bloqueo impuesto hasta la salida de Roman Abramovich como dueño.

chelsea stamford bridge vacio

El Chelsea FC pone números -rojos- a una de sus temporadas más atípicas. El club de la Premier League cerró 2021-2022 con unas pérdidas de 121,3 millones de libras (137,8 millones de euros), un recorte interanual del 27%. En total, el agujero contable acumulado entre los tres ejercicios impactados por la pandemia, de 2019 a 2022, ya sube a 251 millones de libras (285 millones de euros).

La dirección atribuye este resultado negativo al hecho de que “el club estuvo restringido en una serie de áreas que incluyen, entre otras, su capacidad para vender entradas y abonos de temporada, vender merchandising, aceptar reservas de eventos, así como firmar contratos con jugadores y patrocinadores, lo que en conjunto resultó en gastos extraordinarios y pérdida de ingresos”.

A la espera de los estados financieros completos, el Chelsea explica en un comunicado que la cifra de negocio mejoró un 11% interanual pese a la imposibilidad de vender servicios durante varios meses. En concreto, los ingresos ordinarios escalaron hasta 481,3 millones de libras (546,9 millones de euros), mientras que las plusvalías por traspasos subieron a 123,2 millones de libras (140 millones de euros).

En el ámbito del negocio recurrente, el mayor pilar fue el comercial, con 177,1 millones de libras (201 millones de euros) se corresponden con el área comercial.

Este departamento aportó casi un 14% más respecto a 2020-2021, y el conjunto blue corrobora que la actividad estuvo “impulsada en gran medida por el aumento de los ingresos comerciales y de día de partido por el regreso de los aficionados”. Por el contrario, los derechos de televisión rebajaron su aportación respecto a los 273,6 millones de libras (310,8 millones de euros) de 2020-2021 por “las menores distribuciones de la UEFA Champions League y el impacto de la pandemia desde 2019-2020”.

Anticipando un nuevo incumplimiento de las normas de fair play financiero, la nueva propiedad del Chelsea FC anticipa que “se espera que algunas de estas limitaciones -en referencia a las impuestas antes de forzar la venta a Roman Abramovich- tengan un impacto en las finanzas en los años siguientes”. Ello, sostienen, por “el impacto a largo plazo de las restricciones a la celebración de nuevos acuerdos contractuales”.

Pese a ello, la propiedad liderada por Tom Boehly asegura que “continúa cumpliendo con las regulaciones financieras de la Uefa y la Premier League”, después de conseguir refinanciar toda su deuda. En concreto, ha obtenido una línea de crédito renovable de unos 300 millones de libras (351 millones de euros) y un préstamo a plazo fijo de 500 millones de libras adicionales (586 millones de euros).

Esta operación llega meses después de que el consorcio liderado por Boehly adquiriera el Chelsea por 2.500 millones de libras (2.931 millones de euros). También se comprometieron a invertir otros 1.750 millones de libras (2.052 millones de euros) en el club para mejorar la plantilla y las infraestructuras, desde el estadio Stamford Bridge hasta la ciudad deportiva. Bank of America y JP Morgan están entre los bancos involucrados en la financiación.

 

Publicidad

Publicidad