La Liga Profesional de Fútbol Femenino avanza hacia su constitución meses después de anunciarse. Los doce clubes representados por la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (Acff) aceptarán incluir planteamientos de Real Madrid, FC Barcelona y Athletic Club en el nuevo texto, según han informado en un comunicado.

“Dada la importancia de desbloquear el proceso y constituir cuanto antes la liga profesional, estamos dispuestos a incorporarlo por el bien de la liga”, han asegurado. Por ahora no se han destacado cuáles serían esas propuestas a incorporar, aunque la falta de acuerdo unánime era la condición sine qua non para que el Gobierno autorizase la profesionalización real.

El CSD había dado seis meses para alcanzar el acuerdo definitivo. Mientras tanto, había solicitado a la Real Federación Española de Fútbol (Rfef) que asumiera la gestión esta temporada. Esta gestión se mantendrá hasta que haya unos estatutos firmados, por lo que podría extenderse a lo largo de toda la temporada.

El conflicto de algunos clubes con la Rfef ha vuelto a ser notable. La Acff destaca que Levante UD, Real Sociedad y Villarreal CF han sido sancionados por no lucir el parche de la federación en la manga, a pesar de que las bases indican que no es obligatorio para una competición profesional.

Desde la Acff, finalmente, defienden que el nuevo acuerdo, “no puede pretender que sea unánime” y que “esto, además de no ser exigido en la legislación vigente para la constitución de una liga profesional, supone la alteración del normal funcionamiento de cualquier organización democrática que se basa en mayorías, no en unanimidad”.

Hay un borrador de estatutos aceptado por 12 de los 16 equipos, y en las últimas semanas se habían acercado posturas con prácticamente todos, excepto el Real Madrid. Por eso, tal y como adelantó 2Playbook, el CSD propuso elaborar "un listado de lo que consideramos derechos comerciales colectivos y derechos individuales de los equipos, de manera que los clubes puedan ponerse de acuerdo en lo que la Liga puede o no comercializar”, como explicaron desde el organismo.

Este era uno de los últimos escollos, después de que en principio se allanara la cuestión de los quórums en las votaciones. Real Madrid, FC Barcelona y Athletic Club exigían un consenso de al menos el 90% en la adopción de decisiones, un blindaje que buscan precisamente para evitar que se les pueda forzar a colectivizar determinados activos comerciales, como podría ser una de las mangas de la camiseta o la U televisiva.