El deporte catalán vuelve a unirse ante la suspensión de la actividad deportiva en Cataluña. El deporte federado (Ufec), el sector del fitness y el Colegio de Licenciados en Educación Física (Coplefc) han pedido al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (Tsjc) la cautelar para suspender el cierre de gimnasios y el parón de las competiciones, decretado por la Generalitat de Catalunya.

Es una demanda similar a la que presentó la Unión de Federaciones Deportivas de Cataluña (Ufec) y la patronal catalana de los gimnasios (Adecaf) el pasado julio, cuando el Govern decretó el cierre de instalaciones. El Tsjc concedió la cautelar semanas después y los centros deportivos pudieron volver a abrir. A diferencia de en aquella ocasión, ahora está en vigor un estado de alarma, algo que desde el sector creen que no será determinante. “El cerrar las instalaciones deportivas no está sujeto al estado de alarma, sino a la misma normativa jurídica que teníamos en julio, por lo que somos optimistas”, ha explicado Gerard Esteva, presidente de la Ufec.

Por ello, la Ufec, la asociación catalana de gestores de instalaciones deportivas municipales (Gestiona), el clúster catalán del deporte Indescat y Colegio de licenciados en Educación Física (Coplefc) ha presentado un argumentario de treinta páginas para defender su postura y pedir al Tsjc que otorgue las cautelares que permita volver a abrir los complejos deportivos y retomar las actividades deportivas federaras, que hace tres semanas tuvieron que frenar por petición del Gobierno autonómica.

“La medida es absolutamente desproporcionada, como el pasado julio; son también contradictorias si lo que se persigue es la contención del virus”, ha explicado Esteva. “Ha sido un error decretar el cierre de instalaciones y el parón de las competiciones; por eso pedimos una reflexión a la Generalitat de Catalunya para que no se nos cierre y se nos permita actual con responsabilidad”, ha asegurado.

“El deporte es un aliado porque aquellos ciudadanos que practican ejercicio están en mejores condiciones para combatir el virus; el deporte sólo supone un 0,28% de los brotes de la Covid-19”, ha añadido Esteva, que afirma que este sector permite la práctica deportiva segura, la trazabilidad del virus y contribuye al control de la pandemia.

“Los clubes necesitan tesorería, aunque sabemos que las ayudas podrían llegar en 2021 y en 2022”

“El efecto que ha supuesto el cierre de las instalaciones y el parón de las competiciones ha sido contrario al que se buscaba: la práctica deportiva por libre no permite ni esa trazabilidad ni la práctica segura”, ha incidido Esteva.

En la primera ola de la Covid-19, el 70% de los trabajadores del sector deportivo catalán se vio afectado por un Erte, y esta medida también supone un mayor impacto económico. Se estima que los gimnasios de Cataluña dejarán de facturar 100 millones de euros durante la pandemia, y, según la patronal catalana de los centros deportivos, Adecaf, ha solicitado ayudas por 88 millones de euros a la Generalitat.

Esteva ha asegurado que el sector es consciente de que tiene derecho a una serie de ayudas económicas tras el parón de su actividad, pero asume que dichos recursos que aliviarán la necesidad de tesorería llegarán en 2021 o en 2022. “Ya hay entidades que están planteándose presentar concurso de acreedores”, ha admitido.

El presidente de Gestiona, Josep Viladot, ha afirmado que “el sedentarismo es una pandemia” y la actividad física ayuda a la prevención y a la recuperación de las personas que se ha visto afectada por la Covid-19.

“Con este parón a la actividad se espera un impacto en la facturación de 58 millones, que se suma al impacto de los últimos meses; las empresas ya estaban muy al límite, ya se habían financiado; ahora este cierre es peor”, ha apuntado Oriol Serra, directivo de Indescat. La Generalitat de Catalunya se ha comprometido a repartir 10 millones de euros entre el deporte catalán, incluidos clubes deportivos y gimnasios, para mitigar el impacto económico del cierre, un importe que desde Ufec y Adecaf consideran insuficiente.

De hecho, el sector ha pedido un rescate de 1.000 millones de euros para el sector, que ha dejado de ingresar 1.300 millones de euros desde el estallido de la crisis, según la Ufec. Un informe elaborado por la Ufec e Indescat cifra en 618 millones de euros la pérdida del valor económico de las entidades deportivas con ánimo de lucro, como son los gimnasios, y las gestoras de eventos deportivos. Este importe se suma a los 303 millones de euros de pérdida de valor en el deporte sin ánimo de lucro, formado por las federaciones y los clubes deportivos.