La Federación Internacional de Natación (Fina) vuelve al rojo en el primer año posterior a los Juegos de Tokio 2020. La federación perdió 16,3 millones de dólares (14,6 millones de euros) en 2022, un resultado que contrasta con el beneficio de 17,6 millones de dólares (15,8 millones de euros) registrado en 2021.
La Fina cerró 2022 con unos ingresos de 42,9 millones de dólares (38,5 millones de euros), un 25,2% menos que en 2021. ¿El motivo? Principalmente la drástica caída de ingresos procedentes del movimiento olímpico, que apenas aportó 964.000 dólares (860.000 euros) a la Fina en 2022, un 97,2% menos que en 2021, año en el que la federación se benefició de la actividad olímpica generada en Japón.
Esta caída de ingresos se vio compensada, en parte, por el incremento de los ingresos por organización y comercialización de eventos deportivos como el Mundial de natación de Budapest (Hungría), que se aplazó un año, de 2021 a 2022, tras el retraso de los Juegos de Tokio. Esta competición permitió incrementar un 66%, hasta 37,5 millones de dólares (33,7 millones de euros) la que en 2022 volvió a ser la principal fuente de ingresos de la Fina.
La federación elevó sus gastos hasta 47 millones de dólares (42,2 millones de euros), un repunte del 5,8% interanual. Este aumento se explica, principalmente, por el coste derivado de la organización del mencionado Mundial, que elevó el gasto en eventos y comerciales hasta 25,9 millones de dólares (23,2 millones de euros), un 57% interanual más. La Fina también registró unas pérdidas financieras de 12,3 millones de dólares (11 millones de euros), que contrastan con los 4,6 millones de dólares (4,1 millones de euros) que ganó por el mismo concepto en 2021.
Para este año, sin embargo, la Fina es optimista con la celebración de competiciones como el Mundial de natación que se celebra este mes de julio en Fukuoka (Japón). La federación internacional ha presupuestado unos beneficios de 1,4 millones de dólares (1,2 millones de euros) para 2023, que se dispararían en 2024 hasta 29,9 millones de dólares (26,8 millones de euros) por la celebración de los Juegos Olímpicos de París 2024. Para 2023, la Fina prevé ingresar 61,2 millones de dólares (55 millones de euros), mientras que de cara a 2024 apunta a una facturación de 97,9 millones de dólares (87,9 millones de euros).
Al respecto de su recuperación, la Fina confía en percibir una contribución de 35,9 millones de dólares (32,2 millones de euros) por parte del Comité Olímpico Internacional (COI) en 2024. Asimismo, el prize money para los nadadores en 2024 alcanzará los 12,5 millones de dólares (11,2 millones de euros).
