Joma se lanza a la conquista del futsal latinoamericano. La marca toledana, que el año pasado se hizo con la equipación de la Selección Española tras varias décadas en manos de Adidas, ha alcanzado un acuerdo con la Confederación Brasileña de Fútbol Sala (Cbfs) para convertirse en patrocinador técnico del combinado brasileño, según ha podido saber 2Playbook. La semana pasada Joma también se reforzó con la selección de Guatemala.

Joma relevará a la marca Penalty como espónsor, cuyo contrato finalizaba esta temporada tras casi 50 años de relación. Se trata de una alianza histórica, que no se limitaba sólo al patrocinio técnico, sino que situaba a este proveedor técnico local como el principal patrocinador de la confederación junto con Travel Ace Assistance.

La relación entre Penalty y la federación iba más allá del patrocinio. La marca brasileña no sólo figura como socio técnico, sino que también contaba con un acuerdo para producir y distribuir en exclusiva todos los artículos de las selecciones brasileñas masculinas y femeninas. Los términos económicos del acuerdo se desconocen, ni tampoco del nuevo firmado con Joma. La empresa española no ha realizado comentarios. 

La llegada de Joma a Brasil no es casualidad. La compañía cuenta con estructura propia en el país desde 2006, y parte de la producción de sus artículos deportivos se realiza en fábricas del país del Cono Sur, lo que supone una ventaja competitiva frente a otras marcas que optaban a explotar uno de los principales contratos en el mundo del fútbol sala.

Joma tiene filial en Brasil y parte de su producción también se realiza en este país

Brasil ha liderado durante las últimas décadas el ranking Fifa y actualmente figura en tercer lugar, por detrás de Bélgica y Francia. Pese a caer de los más alto del pódium, aún es la selección con más mundiales de la historia, con cinco entorchados. El último se logró en 2012 y el objetivo es arrebatar a Argentina la corona que logró en 2016 en el Mundial de Lituania, aplazado hasta octubre de 2021 por la Covid-19. La confederación aún no ha indicado si Joma podrá debutar como patrocinador técnico en esta cita.

Con quien sí estará es con la Selección Española, con la que firmó en febrero de 2020, un mes antes de la pandemia, con vistas a debutar en el Mundial. Joma logró que la Real Federación Española de Fútbol (Rfef) desdoblara los activos del fútbol y el futsal por primera vez en la historia, ya que hasta entonces todo el paquete estaba en manos de Adidas.

El acuerdo con la Rfef no sólo incluye los combinados nacionales, sino también el patrocinio oficial de todas sus competiciones de fútbol sala, tanto masculinas como femeninas. Es un acuerdo similar al que la Cbfs tenía con Penalty, y que podría replicarse con la firma del nuevo acuerdo con Joma para seguir ganando cuota de mercado en Brasil.

Joma ha logrado hacerse en menos de un año con dos de las principales selecciones del mundo, a las que se añaden las federaciones de Rumanía, Ucrania y Guatemala. En el ranking femenino, Brasil cae hasta el octavo lugar, mientras que España aguanta en la posición número 12.

Joma se ha hecho con España y Brasil en menos de un año en el fútsal

Joma supera los sesenta patrocinios en el fútbol sala en todo el mundo entre selecciones, jugadores, clubes y ligas. En el plano internacional destacan el ASA Bisceglie femenino, el CD Lyon, el Acqua e Sapone Calcio A5, el Kairat Almati o el Gazprom, entre otros. En clave española, además de la Rfef, su principal activo es la Lnfs.

El patrocinio de la Primera Rfef Futsal fue uno de los grandes golpes sobre la mesa de Joma. El acuerdo se selló en el verano de 2019 y puso fin a una relación de seis años de relación con Kelme, uno de sus principales rivales en este deporte. Junto con el patrocinio técnico, Joma se aseguró ser balón oficial en Primera y Segunda División, un acuerdo que Alberto López, director general de la compañía, destacó en su día como un punto de inflexión “en la proyección internacional de Joma”.

Un año más tarde volvería a asestar otro golpe a Kelme haciéndose con el patrocinio de uno de los principales clubes españoles, El Pozo Murcia Costa Cálida. Al conjunto murciano hay que añadir el acuerdo con el Movistar Inter, renovado hasta 2022 y campeón de liga en 2020, el Viña Albali Valdepeñas, que disputó la final, y otros como el Ribera Navarra FS y el Pescados Rubén Burela, líder en la Liga Femenina en 2020-2021.

En 2019 esprintó en fútsal para arrebatar cuota a Kelme y frenar el avance de Hummel

La huella de Joma en el deporte español

Joma es la marca deportiva con más representatividad en la élite del deporte español. La firma suma hasta treinta acuerdos con las principales federaciones, clubes y ligas de fútbol, baloncesto, balonmano, fútbol sala, voleibol, hockey, golf, motor y ciclismo, entre otras, según los datos extraídos por 2Playbook Intelligence, la unidad de inteligencia de mercado de 2Playbook, que tiene indexados más de 4.000 acuerdos de patrocinio en España.

La marca suma cuatro acuerdos en LaLiga Santander, dos en Primera Femenina, otro en Segunda División y otros cuatro en la Lnfs. A estos hay que añadir clubes de la ACB, Superliga, Asobal, el Comité Olímpico Español, la federación de rugby, la de deportes de hielo, la de balonmano, tenis de mesa y, sobre todo, la de atletismo, uno de sus principales estandartes, así como otros eventos y entidades en las categorías inferiores.

La compañía no especifica la inversión que realiza en marketing y patrocinio deportivo. Su negocio ordinario se ha triplicado en los diez últimos años, hasta rozar los 200 millones de euros en 2019, según las últimas cuentas depositadas en el Registro Mercantil. El grueso de la facturación procede del extranjero, y además de la filial de Brasil, Joma cuenta con estructura propia en otros países como Estados Unidos, México, China, Panamá e Italia.

Su sede y fábrica principal se encuentra en Portillo (Toledo), desde donde se da servicio a más de 120 países y emplea a 400 personas. De estos, en torno a la mitad tienen un contrato fijo, mientras que el resto es personal no cualificado que rota para cubrir las épocas de más demanda del año.