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Courir da al ‘pause’ en España para digerir la inversión de 20 millones en su centro logístico

La cadena especializada en sneakers ha ampliado su almacén en Francia para acometer los planes de expansión en la Península Ibérica y Bélgica. Pese a la Covid-19, Courir ha entrado en Portugal y abrirá las ocho previstas para este año en 2021.

courir tienda francia

Courir ha estado de aniversario durante las últimas semanas. La cadena especializada en sneakers ha alcanzado los cuarenta años de historia en mitad de una pandemia mundial, que ha obligado a frenar parcialmente su expansión internacional. En España han logrado salvar cuatro aperturas de las doce previstas para 2020, aunque el resto se producirán, si la situación sanitaria y socioeconómica lo permite, en el primer semestre de 2021. En paralelo, la compañía francesa está ampliando su centro logístico para dar gas a sus filiales en Europa.

Su hub, ubicado en la localidad de Chateauroux, triplicará su superficie, hasta 18.000 metros cuadrados. Courir ha acordado con su socio logístico una inversión conjunta de 20 millones de euros y la previsión es que esté listo en el segundo semestre de 2022. “La ampliación del almacén permitirá a las tiendas del resto de Europa estar al mismo nivel que las de Francia”, explica a 2Playbook Richad Vidal, director general de la cadena en la Península Ibérica.

“Tener un centro logístico en cada país cuando desde Francia podemos recibirlos en 48 horas no tiene sentido”, sostiene, sobre la posibilidad de instalar su propio hub en España. “Es una inversión enorme y salvo que tengamos una red de cien tiendas, no se rentabiliza”, argumenta.

Courir cerrará el año con 17 puntos de venta en España tras las dos últimas aperturas en Barcelona y Vigo. Pese a al frenazo en los planes de expansión en el mercado ibérico, la cadena francesa ha logrado dar el salto al territorio luso con dos aperturas en Coimbra y Oporto. El objetivo es “seguir reforzando nuestra presencia en zonas estratégicas como Lisboa, el Algarve y el norte”, subraya Vidal.

Courir triplicará la superficie de su centro logístico para dar gas a su expansión internacional

Otro de los puntos calientes de Courir es Bélgica, donde también subieron la persiana de su primera tienda este año, antes de la pandemia. La cadena concluirá 2020 con una red de once establecimientos en el corazón de Europa, todos ellos propios, al igual que los de España, Portugal y Francia.

La estrategia del grupo pasa por potenciar su expansión en este país antes que en la Península Ibérica. ¿El motivo? “La facturación por metro cuadrado es mucho más alta, lo que hace que las tiendas sean más rentables y sumen más ingresos”, asegura Vidal.

Courir, que no desvela su cifra de negocio en España, cerró 2019 con una facturación global de 261 millones de euros. El 90% proceden de Francia, su mercado nativo, mientras que el 10% restante se deriva de España, Luxemburgo y las masterfranquicias ubicadas en territorios de habla francesa fuera de Europa y Oriente Medio. 

“El año anterior crecimos a ritmo de doble dígito y se marcó como el año de acelerar la expansión en España; triplicamos el número de tiendas y hasta febrero de 2020 íbamos en la misma línea, pero la Covid-19 echó el freno a todo”, se lamenta el director general de la filial. “Hemos llegado a experimentar caídas en los ingresos del 60% y el 70% en Barcelona, Palma de Mallorca o Alicante, las ciudades más turísticas”, explica.

Una vez superado el primer revés de la pandemia, Courir aceleró en el tercer trimestre, al igual que ha sucedido con otras compañías del sector. “En verano hemos registrado alzas intermensuales del 7% y el aumento del ticket medio nos permitió compensar la caída del tráfico, pero en octubre se ha vuelto a frenar todo”, indica.

Francia aporta el 90% de la facturación de Courir, que ascendió a 261 millones en 2019

Vidal hace referencia a la situación sanitaria en España, que pese a que aún se resiste a un confinamiento total, como ha sucedido en los países vecinos, sí ha provocado el cierre de comercios y la caída del consumo. “Hubo un momento en el que pensamos que si la tendencia seguía así podíamos salvar el año, pero octubre ha sido muy duro no sólo por la incertidumbre, sino porque se vuelve a notar que ha bajado el nivel adquisitivo”, asegura Vidal.

Courir ha presentado un segundo Expediente de Regulación Temporal de Empleo (Erte) de fuerza mayor para los empleados de las tiendas ubicadas en los centros comerciales de Barcelona, cerradas tras la última decisión de la Generalitat. El resto de su plantilla trabaja con una reducción de la jornada laboral y la cadena ha vuelto a comprimir los gastos al máximo en previsión de un segundo cierre más prolongado.

“Con suerte podemos abrir antes de Navidad, como en Bélgica, que ya está decretado hasta el 15 de diciembre”, sostiene el directivo. “Ya hemos aplazado todos los proyectos que podíamos aplazar, hemos recortado los gastos al máximo… pero si la situación sanitaria no mejora y perdemos el Black Friday (a finales de noviembre) y Navidad, será difícil remontar incluso en 2021”, asegura.

Por el momento, Courir no se plantea el cierre de ninguna de sus tiendas, ni siquiera las más afectadas en los centros comerciales. “El plan de expansión sigue, solo que aplazado y pendiente de la situación de cada país; además, con los grandes propietarios no negociamos por una única tienda, sino que son paquetes para varias ubicaciones y eso genera condiciones más ventajosas”.

De hecho, para Vidal el precio por metro cuadrado, especialmente en ubicaciones premium, comenzará a bajar tras la segunda ola de contagios, lo que permitirá encontrar nuevas oportunidades. “Tras la crisis el mercado va a ser más duro para los grandes operadores textiles, y los propietarios tendrán que valorar si mantener la misma renta y tener inquilinos que al final dejan de pagar, o bajarla para encontrar un socio estable”, concluye.

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