El CD Mirandés se rehace del golpe de la Covid un año más. El club rojillo cerró la última temporada con un beneficio de 413.148, lo que sumado a los 1,5 millones ganados en la 2019-2020 dan como resultado un superávit de casi dos millones en pandemia. Para esta temporada, el presupuesto aumentará un 15%, hasta 8,8 millones, según ha informado la entidad tras la celebración de su junta general de accionistas, que aprobó todos los puntos del día.

Sin dar más detalles sobre la partida de ingresos y gastos de la última temporada, el presidente del Mirandés, Alfredo de Miguel, valoró como “óptimas” las cifras y recordó la merma sufrida por la entidad por el cierre del Estadio de Anduva. La taquilla y los abonos venían aportando algo más de 500.000 euros a las arcas rojillas antes de la pandemia, según datos de 2Playbook Intelligence, la primera herramienta de inteligencia de mercado del deporte español.

Asimismo, la entidad llevó a cabo una inversión de más de medio millón de euros para la instalación de las cuatro torres de iluminación y la implantación de un nuevo césped, obras que responden a las exigencias del reglamento de LaLiga.

Esta inversión, la más importante del Mirandés en este apartado, se incrementará en los próximos años y para ello contará con un nuevo socio: LaLiga Impulso, el proyecto conjunto de LaLiga y CVC, por el que recibirá 7,4 millones. La entidad proyecta una nueva grada de Tribuna, “una obra muy compleja” -según explicó el presidente-, pero que “podríamos comenzar con este proyecto en junio de 2023 cuando hayamos percibido el 75% del fondo”.

Respecto a esta entrada de CVC en el negocio del fútbol español, De Miguel quiso dar su valoración ante los accionistas: “LaLiga hay que entenderla como un conjunto de equipos. Si se devalúan los equipos el producto a vender también se devalúa y eso no nos interesa. Para nosotros estos fondos no son imprescindibles, pero no queremos una Liga debilitada, nos interesa fuerte”.