El Movistar Estudiantes entra en el reparto de ayudas del CSD a los clubes de la ACB sobre la bocina. El club madrileño, que se había quedado fuera del reparto provisional por tener deudas pendientes de pago con Hacienda, finalmente ha solventado estos pagos y podrá recibir las ayudas que en un principio se le habían negado. En concreto, la entidad colegial recibirá 371.622 euros, de los cuales 316.652 euros corresponden al roto del ticketing y el resto son por los gastos extraordinarios fruto de la pandemia (test y EPIs).

De este modo, el CSD repartirá los 8 millones que se comprometió a repartir entre todos los clubes que compitieron en la Liga Endesa en 2019-2020. Los clubes Asobal, por su parte, recibirán 1,4 millones de euros, como ya adelantó 2Playbook la pasada semana. De entre todos ellos, sólo el Movistar Estudiantes presentó alegacionse.

Eso sí, el importe repartido está lejos del que reclamaron los clubes. En ACB se calculó una merma económica de 19,31 millones entre todos, más del doble de lo que va a repartir del Gobierno. En Asobal los clubes fueron más comedidos y sus peticiones sólo superaban en 20.742 euros al importe que el CSD se comprometió a repartir.

El club que más ayudas recibirá es el Real Madrid Baloncesto, con 989.041 euros, seguido del FC Barcelona de básquet, con 677.890 euros. En Asobal, manda el CD Ademar León, con 196.631 euros, pues sólo por la merma en la taquilla y abonos recibirá más que el total de ayudas de cualquier otro club.

El presidente del CSD, Jose Manuel Franco, ha destacado que “la recuperación justa que el Gobierno impulsa en el conjunto de la economía es la que nosotros tratamos de impulsar en el ámbito deportivo con nuestras decisiones. Desde hoy, el baloncesto y el balonmano español tendrán un poco más fácil su retorno a la normalidad”. Estas ayudas entran en vigor hoy mismo, por lo que se repartirán a los clubes antes de que acabe el año.

Estos 9,4 millones de euros que el Gobierno va a repartir proceden del 1% de los derechos de televisión de LaLiga, que tras los Pactos de Viana se comprometió a destinar este porcentaje de su negocio audiovisual a ayudar al deporte español tras el estallido de la crisis sanitaria. Fue la moneda de cambio que favoreció que el CSD diera el visto bueno al regreso de las competiciones profesionales tras el confinamiento.