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LaLiga da oxígeno a los clubes: el impacto Covid en el límite salarial se dividirá en cinco años

La gestora de la competición ha modificado el reglamento, por el que las pérdidas por la pandemia también tendrán en cuenta la caída de los traspasos. Con tal de flexibilizar la confección de plantilla, ese golpe ya no deberá compensarse en un año.

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LaLiga empieza a abrir el grifo para que los clubes puedan retener e incorporar nuevo talento. Tras dos años de duras restricciones en el gasto para evitar una mayor generación de pérdidas, la gestora de la competición ha flexibilizado las normas de control económico a partir de 2022-2023. La medida más destacada es que se podrá computar en cinco años las pérdidas provocadas por la Covid-19, de modo que eso no penalice exclusivamente en el límite de gasto en plantilla autorizado por el próximo curso.

En la circular remitida a los clubes, a la que ha accedido 2Playbook, se explica que ese golpe de la pandemia ahora se distribuirá en cinco años: un 15% en 2022-2023, un 20% en 2023-2024 y 2024-2025, respectivamente, y un 22,5% en 2025-2026 y 2026-2027. En términos absolutos, si un club tuviera unas pérdidas atribuibles a la Covid por 10 millones entre 2019 y 2022, ese importe ya no se restaría en su totalidad a 2022-2023, sino que en la próxima temporada sólo serán 1,5 millones.

La medida beneficiará a una veintena de equipos de LaLiga, que especialmente en 2020-2021 acumularon importantes pérdidas. En concreto, tal y como avanzó 2Playbook, el agujero agregado ese año fue de 803 millones de euros después de impuestos. A esta cifra hay que añadir los 19,9 millones en rojo con que se terminó 2019-2020 y las que previsiblemente aún asumirán algunos en 2021-2022 por la lenta recuperación que ha experimentado el ticketing, las compensaciones pendientes con abonados y el escaso movimiento que hubo en el mercado de fichajes del pasado verano.

Javier Gómez, director general corporativo, no ha dado aún su previsión, aunque los presupuestos agregados de los clubes apuntaban a unas pérdidas conjuntas de 55 millones siempre que se cumplan los objetivos por traspasos y otras operaciones extraordinarias. “El resultado de esta temporada será mucho mejor que el de 2020-2021”, ha asegurado Gómez. Eso sí, a esa cifra habrá que añadir “200 millones que son pérdidas consentidas”, en referencia a la inyección de CVC y que parcialmente se podía destinar a ampliar el límite de plantilla. Eso sí, esas pérdidas autorizadas en los tres primeros años de LaLiga Impulso deberán revertirse en los cinco años siguientes.

Javier Gómez (LaLiga): “El resultado económico de los clubes esta temporada será mucho mejor que el de 2020-2021”

Esta no es la única flexibilización introducida por LaLiga, que finalmente sí permitirá computar como pérdidas por la Covid la caída de ingresos por las plusvalías por traspasos. Eso sí, al igual que se realiza con los presupuestos, el importe que se puede cargar al cálculo es la diferencia entre la media de ventas de los tres ejercicios previos a la crisis sanitaria y lo que han conseguido en las ventas de 2020-2021 y 2021-2022, pues 2019-2020 sí se operó con normalidad en las ventas de verano e invierno.

Estas dos modificaciones son un importante alivio para esos veinte clubes que arrastran pérdidas en los últimos tres años, aunque sobresalen Atlético de Madrid, Sevilla FC, Real Betis, Valencia CF, Levante UD, Athletic Club o Villarreal CF. Caso diferente es el del Barça, puesto que sus pérdidas antes de impuestos en los últimos dos años ascienden a 688,58 millones de euros, a los que podrían sumarse otros 100 millones de 2021-2022 si no se concretan operaciones corporativas. Entre estas medidas están la venta de Barça Studios o su entrada en el proyecto LaLiga Impulso mediante la creación de una sociedad a la que traspasar sus derechos audiovisuales, como adelantó 2Playbook.

¿La razón? Una parte muy importante de ese agujero no puede atribuirse a la pandemia, sino que se corresponde con la limpieza de balance que aplicó la junta directiva de Joan Laporta al llegar, cargando costes extraordinarios por 250 millones de euros entre la amortización anticipada del valor de varios futbolistas y provisiones por riesgos legales.

Dicho de otro modo, LaLiga no permitirá al Barça que se deduzca del límite salarial autorizado para 2022-2023 las pérdidas provocadas por esta reestructuración, que seguiría siendo una importante losa. Eso sí, la recuperación de los ingresos ordinarios y las mencionadas ventas de activos podrían ayudar a mejorar un límite salarial que seguiría siendo inferior al gasto real en plantilla deportiva, que este año ronda los 550 millones de euros.

Pese a la introducción de estos cambios, lo cierto es que clubes como el Barça y varios más seguirán estando excedidos respecto al límite salarial que le autorice LaLiga. A ellos, como hasta ahora, se les permitirá ir inscribiendo en función de los ahorros que vayan generando con la compraventa de jugadores. Ahora bien, se empieza a restringir su uso para acabar de imponer una readecuación del gasto a la realidad de los ingresos.

Hasta ahora, la competición presidida por Javier Tebas permitía gastar un euro por cada cuatro euros de ahorro, que se ampliaba a dos euros de reinversión si la marcha de un futbolista generaba un ahorro superior al 5% del coste total de la plantilla. Ahora, esa opción con las grandes ventas se reducirá a un 1 euro por cada 3 ahorrados y sólo en el mercado de verano de 2022. “A partir del próximo se eliminará”, ha recordado.

Otra media, que hasta ahora únicamente se aplicaba en Segunda División, es la dirigida a evitar que esta flexibilidad se traduzca en el diferimiento de salarios. Un ejemplo: un club se ahorra 12 millones y logra reinvertir 3 millones en el salario de un futbolista que llega libre, con la promesa de subirle el sueldo en años posteriores. Esa subida no podrá superar en ningún caso el 30%.

Estos cambios van encaminados a intentar que los clubes tengan menos complicaciones a la hora de inscribir futbolistas, sobre todo ahora que los ingresos empiezan a regresar a niveles pre-Covid y que los nuevos contratos de televisión dan garantías. Eso sí, el área de control económico ha establecido stoppers a una mala gestión, como obligar a que la posición de tesorería siempre sea positiva. “La guillotina del impago está ahí”, ha advertido Gómez, en referencia a que las sanciones llegan si se producen impagos.

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