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El ‘winter is coming’ del deporte en TV: ¿cómo sobrevivir a dos meses dominados por el Mundial?

Los operadores de televisión que han confiado en el fútbol como palanca de captación y retención de clientes se enfrentan a casi dos meses sin ligas nacionales, ni Champions, ni motor.

television oscura

Las ligas nacionales de fútbol hace tiempo que se convirtieron en uno de los productos más importantes para cualquier plataforma de televisión: contenido cada fin de semana que prácticamente ocupa todo el año. Sin embargo, 2022-2023 es la temporada más atípica de la historia, con un Mundial en medio del calendario habitual que dejará en el aire a millones de aficionados sin partidos de su club. ¿Podrán retener las televisiones a sus suscriptores sin incorporar las retransmisiones de Qatar 2022? ¿Cómo afrontarán este Winter is coming para los directos de contenidos premium?

El calendario acordado por todos los estamentos futbolísticos estableció prácticamente dos meses sin partidos entre clubes, pues no habrá más partidos de LaLiga Santander a partir del 10 de noviembre. A partir de ahí, se abrirá un lapso de ausencia hasta el 29 de diciembre, que la propia patronal quiere intentar minimizar con giras de amistosos de algunos equipos en el extranjero. Más dura será la ausencia de la Champions League, que cerrará la fase grupos el 3 de noviembre y no regresará hasta el 14 de febrero.

De momento, el único que se ha garantizado la emisión del campeonato de selecciones Rtve, que a principios de año cerró un acuerdo con Mediapro para emitir hasta 21 duelos en abierto por unos 35 millones de euros. Para los 64 partidos restantes, el grupo audiovisual está preparando un canal que emitirá a lo largo de todo el torneo y que se sublicenciaría de forma no exclusiva entre los operadores.

El problema es muy relevante para Orange, cuya apuesta es exclusivamente por el fútbol, si bien cuenta con el contrapeso de que sus contratos con los consumidores abarcan más servicios, como la telefonía móvil y fija o el ADSL. Es decir, que difícilmente podría producirse una fuga masiva de clientes en este periodo, especialmente porque las portabilidades suelen concentrarse al inicio de la competición.

A diferencia de Orange, Movistar+ cuenta con más activos deportivos para emitir durante el parón de las ligas nacionales y continentales de fútbol

El destino, si se trata de fútbol, no podría ser otro que Movistar+, y su situación será idéntica, pues tampoco se podrán disputar ninguna de las otras competiciones internacionales que posee. Eso sí, ambos podrán defender que en su oferta sí seguirá activa LaLiga SmartBank, pues la Segunda División no parará su actividad.

Otra cuestión es Dazn, cuyo modelo de negocio se basa exclusivamente en las suscripciones al contenido. La elección de fechas de Qatar 2022 la dejará casi huérfana de contenido premium entre noviembre y diciembre, pues se da la circunstancia de que también habrán finalizado las temporadas de Fórmula 1 y MotoGP, que son sus otros dos productos estrella en España.

Es la más expuesta a posibles cancelaciones temporales de suscripción, si bien por eso ya fue muy agresiva en su campaña de lanzamiento del producto específico de LaLiga, promoviendo la compra del pase anual frente al mensual. Y es que, a diferencia de Movistar+ y Orange, Dazn lo apostó todo a Primera División y descartó incorporar el canal de Segunda a su oferta. El mes de octubre ha logrado blindarlo con El Clásico, que será su último gran partido de FC Barcelona y Real Madrid antes del parón; después, llegarán sus duelos frente a UD Almería y CA Osasuna y Rayo Vallecano y Cádiz CF, respectivamente.

La OTT británica confía en retener al máximo de usuarios con la Euroliga, Liga F y nuevas producciones de contenido atemporal, como los documentales sobre Ronaldo y Maradona, uno sobre la Selección de Camerún o un proyecto en torno al Barça en el que están trabajando. Ninguno tiene la fuerza del directo o la tracción de LaLiga, cuyas audiencias de pago subieron un 26% interanual en 2021-2022, hasta una media de 301.000 espectadores por partido.

En una situación similar se van a encontrar los bares que han hecho del fútbol uno de sus grandes reclamos de clientes el fin de semana. Sendos estudios de Kantar Media y Relevance Marketing estiman que seis millones de personas acuden cada semana a un bar para ver el fútbol, con un gasto medio de 13 euros. Sin embargo, toda esa oferta desaparecerá temporalmente, pues el producto diseñado por LaLiga para estos locales se basa en sus dos competiciones, las de Uefa y las que incorpora con el acuerdo de sublicencia de Dazn.

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