“Pronto no quedará nada que salvar”. Así de contundente se ha mostrado Indescat, el clúster de la industria del deporte en Cataluña, que cifra en 200 millones la caída de la facturación del sector promotor de eventos deportivos en 2020, a causa, principalmente, del impacto de la Covid-19 y el confinamiento provocado por la pandemia, que ha obligado a cancelar la mayor parte de su oferta.
En un comunicado, la industria deportiva catalana recuerda que las afectaciones provocadas por el cuarto cierre de centros deportivos afectan también a los eventos y la parte productiva del sector. “Ellos también han tenido que detener una parte importante de su actividad”, lamenta.
“Estamos tocados de muerte”, ha afirmado Anna Pruna, presidenta de Indescat, quien ha recalcado que “el deporte es salud y un servicio esencial”. Por su parte, Jordi Roquer, miembro de la junta directiva del clúster y fundador de SevenMila, ha lamentado que “las ayudas del Gobierno han sido mínimas: no cubren ni de lejos no sólo los ingresos que no hemos tenido ni tendremos, sino las propias medidas que hemos tenido que aplicar durante estos meses”.
Además, Indescat denuncia que “se deja fuera de estas ayudas al 71% del tejido empresarial del deporte, ya que se han cancelado la mayoría de los eventos deportivos y, todo junto, acaba afectando a toda la cadena productiva y de valor del sector”.
“Se está volatilizando aquello que se inició con los Juegos del 92”
“Todo aquello que se inició en los Juegos del 92 y que se consolidó como una potente industria del deporte se está volatilizando”, ha asegurado Roquer. Del total de 957 millones de euros de valor agregado bruto (VAB) que preveía generar toda la industria del deporte antes de la Covid-19, 679 millones de euros debían llegar de los eventos, productos y servicios deportivos.
“Sólo estas empresas han dejado de aportar 633 millones de euros al VAB durante 2020 al dejar de facturar 200 millones de euros”, recalca Indescat, que asegura que “el 2021 ha comenzado tan mal como acabó el 2020; son muchas las empresas que no pueden resistir más, cuando todavía quedan muchos meses de obstáculos por delante; se ha de actuar de inmediato, no hay tiempo que perder”.
