A pesar del golpazo provocado por la Covid-19, buena parte de los grandes eventos deportivos han sobrevivido a los efectos de la pandemia. Sin embargo, la industria ha visto cómo ha adelgazado su valor, principalmente, en los relacionado con la televisión. Así, la venta de derechos audiovisuales en el deporte se devaluó en un 12% en 2020, según SportBusiness Consulting.

El informe Global Media Report destaca que el deporte global dejó de facturar 6.000 millones de dólares (casi 5.000 millones de euros) en el último año por televisión, hasta los 44.600 millones de dólares (36.940 millones de euros). El golpe fue mitigado parcialmente por la fortaleza de la industria del fútbol, el deporte rey en este sentido. Las competiciones futbolísticas generan el 42% del valor total de la industria.

La Covid-19 llegó en el mejor momento para la industria audiovisual ligada al deporte, tras superar los 51.000 millones de dólares (42.239 millones de euros) de valor en 2019, primera vez que se superaba la barrera de los 50.000 millones.

La tendencia al alza de los últimos años vislumbraba un negocio que alcanzaría los 56.100 millones de dólares (46.500 millones de euros) en 2022, algo que, tras la Covid-19, tendrá que esperar. 

Por disciplinas, el fútbol generó un volumen de negocio de 18.900 millones de dólares (15.653 millones de euros), mientras que el fútbol americano, aupado por la NFL, sigue en el vagón delantero. La gran liga norteamericana representa un 17,8% del valor total, en torno a 8.000 millones de dólares (6.625 millones de euros).

En cuanto a las regiones, sólo Estados Unidos representa el 43,6% del valor mundial de los derechos de televisión. Una significativa cifra que la consultora deportiva prevé siga creciendo, mientras su gran rival político y económico, China, vivirá una desaceleración.